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Heriberto Bodeant, obispo de Melo, ayer, en la sede de la Conferencia Episcopal, en Montevideo.

Foto: Nicolás Celaya

Es pecado

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Iglesia Católica se mostró reacia a la baja de la edad de imputabilidad.

En el marco de una conferencia de prensa tras la culminación de la asamblea plenaria de la Conferencia Episcopal Uruguaya (CEU), su secretario general, Heriberto Bodeant, dijo que “observa con preocupación” la unión civil entre personas de un mismo sexo, desestimó que los abusos sexuales de sarcedotes a menores sean numerosos en Uruguay y se preguntó “hasta dónde la inseguridad es una realidad o una sensación”.

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Respecto a la baja en la edad de imputabilidad que promueve el sector colorado Vamos Uruguay, Bodeant manifestó: “La Iglesia va a estar a favor de las medidas preventivas y educativas, más que de la visión represiva”. Además, se preguntó “hasta dónde la inseguridad es una realidad o una sensación” y dijo mostrarse sorprendido por comentarios de varios turistas que le dicen que “por Montevideo se puede caminar”. “A veces las cosas son un poco relativas y vamos sintiendo una temperatura que tal vez no es exactamente la que está reinando”, reflexionó.

Las declaraciones de Bodeant se produjeron luego de la presentación de unos datos que la “pastoral penitenciaria” brindó a la CEU sobre las condiciones de reclusión de los presos. Allí se consigna que cerca de 60% de los encarcelados son reincidentes y que 50% de ellos son jóvenes. El comisionado parlamentario Álvaro Garcé ratificó estas cifras a la diaria. Agregó que aproximadamente 75% de los presos tiene menos de 30 años, y la mayoría de ellos ingresa por crímenes contra la propiedad. Según Bodeant, desde la pastoral se mira con preocupación el tema y se trata de aportar a la humanización de la cárcel. “Sobre todo a partir de esa constatación de la reincidencia, que marca un fracaso del sistema”, interpretó.

Confesiones

Para Bodeant, el llamado del arzobispo Nicolás Cotugno a “seguir los pasos” del ex presidente Tabaré Vázquez fue claro: “Si le llega al presidente Mujica un proyecto que legalice el aborto, que lo vete”. De todas maneras, admitió que “ya existe un pronunciamiento del presidente de no vetar un eventual proyecto”. Consultado acerca de la posibilidad de dirimir el tema mediante una consulta popular, el obispo fue tajante: “No se puede plebiscitar la vida”. Respecto al decreto reglamentario de la Ley de Salud Sexual y Reproductiva, aclaró que la molestia de la Iglesia fue tanto por la obligatoriedad para los centros de salud de asistir los abortos en condiciones de riesgo como de distribuir métodos anticonceptivos y preservativos, aunque estimó que lo primero es una falta mucho más grave que lo segundo. También ratificó la postura de la CEU de que el Círculo Católico se mantenga como una institución “católica”, aunque admitió que el tema lo está manejando el propio Cotugno.

Por otra parte, dijo que si bien no hay una postura de la CEU respecto a la unión civil entre personas de un mismo sexo, se ve con preocupación este tipo de vínculo porque “de alguna manera está queriendo encaminarse hacia lo otro [el matrimonio]”. Por último, descartó que existan muchos casos de abuso sexual de sacerdotes católicos hacia menores en Uruguay y dijo que la Iglesia no lleva un conteo. “Ha habido casos en distintas épocas, pero el tema no tiene la misma dimensión que en otros países”, concluyó.

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