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El sueño de la casa propia

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Jubilados buscan mejorar situación económica de quienes perciben ingresos inferiores a 4.600 pesos mensuales y apuestan a tener viviendas dignas.

La Organización Nacional de Asociaciones de Jubilados y Pensionistas del Uruguay (ONAJPU) solicitó una entrevista con la ministra de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente, Graciela Muslera, con el fin de concretar la construcción de 10.000 soluciones habitacionales para jubilados, en el marco del Plan de Impacto Habitacional.

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Sixto Amaro, dirigente de ONAJPU, explicó a la diaria que existe un fondo para construir viviendas para jubilados que dispone actualmente de 160 millones de dólares. Los integrantes de la organización tienen buenas expectativas respecto de los anuncios de la actual administración “de construir viviendas para los sectores más desposeídos”.

Hoy día, las soluciones habitacionales del Banco de Previsión Social (BPS) se entregan a aquellos jubilados con ingresos inferiores a las 12 unidades reajustables, o sea, unos 5.500 pesos.

Amaro indicó que ONAJPU aspira a resolver “la angustia de 10.000 jubilados, de los cuales la inmensa mayoría espera por su vivienda desde la década de 1990”.

Todavía falta

El fondo para construir viviendas para jubilados se creó por ley en 1986. Los jubilados fueron quienes aportaron hasta 2007, y a partir de entonces, la reforma tributaria eliminó el Impuesto a las Retribuciones Personales (IRP) y estableció que el aporte comenzara a hacerlo Rentas Generales.

Amaro explicó que entre 1987 y 2007 el fondo recaudó 430 millones de dólares y que hasta el momento se han construido 5.900 soluciones habitacionales para jubilados, es decir que faltaría casi el doble de lo edificado hasta hoy.

Consultado sobre la posibilidad real de edificar 10.000 viviendas con 160 millones de dólares, Amaro indicó que todo “depende del dinamismo y la cristalinidad en el sentido de abaratar los costos”. Agregó que en el marco de un plan de viviendas, hay que “hablar con el SUNCA, con FUCVAM y con los organismos que pueden aportar, como la Facultad de Arquitectura, para que las viviendas sean decorosas y no se transformen en guetos donde vivan únicamente jubilados”.

Fondo desordenado

Amaro afirmó que de las 5.900 viviendas edificadas “hay apartamentos y casas buenas, hay muchas que están en condiciones medias y una parte muy importante presenta un estado deplorable”.

Indicó que hay una mala construcción que ha sido realizada a partir de la década de 1990, que coincidió “con dos administraciones distintas: en la primera época el fondo lo administraba el Banco Hipotecario del Uruguay [BHU] y en una segunda etapa, y hasta hace muy poco tiempo, el Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente [MVOTMA]”.

Desde hace seis meses la administración del fondo volvió a estar bajo la órbita del Banco de Previsión Social (BPS) y funciona con el control de una comisión honoraria administradora, integrada por dos miembros del MVOTMA, dos del BPS y dos de ONAJPU. “Desde hace algunos meses tenemos una información que antes no poseíamos y los fondos que se manejaron anteriormente al gobierno de Vázquez fueron administrados en el marco de un desorden absoluto”, señaló Amaro, quien prefirió no detallar la situación.

Jubilaciones bajas

Según cifras de ONAJPU, en nuestro país hay alrededor de 360.000 jubilados, de los cuales 30.000 cobran menos de 4.600 pesos mensuales, es decir que están por debajo de la línea de pobreza.

La organización plantea que el gobierno eleve estas jubilaciones. Ya han mantenido entrevistas con integrantes del Poder Ejecutivo por el tema, y están a la espera de una respuesta. Asimismo, solicitaron el apoyo de la comisión de Seguridad Social de la Cámara de Diputados, “para que el Parlamento juegue su papel y apoye estas iniciativas que, en última instancia, ayudan a toda la sociedad”.

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