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Pedro Bordaberry, Jorge Larrañaga, Jorge Gandini, Enrique Rubio y detrás de éstos Germán Cardozo, ayer, antes del inicio del acto de cierre del proceso de negociaciones entre los partidos políticos con representación parlamentaria, en el Salón de Fiestas del Palacio Legislativo.

Foto: Nicolás Celaya

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Partidos con representación parlamentaria anunciaron acuerdos programáticos y de reparto de cargos estatales.

Con bombos y platillos, gobierno y oposición se congratularon mutuamente de haber concluido los acuerdos para desarrollar políticas comunes en las cuatro áreas estratégicas, así como en la gestión y control de organismos estatales. No obstante, al menos dos hechos opacaron la jornada: el Partido Nacional (PN) fue el único que llegó sin consenso interno, mientras que el oficialismo se compró un lío con la inclusión del Partido Colorado en el SODRE, ya que en la institución y en el Ministerio de Educación y Cultura (MEC), del que depende, no tenían conocimiento y ya están en funciones sus tres jerarcas.

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Cronología

2009

09/12. Mujica recibió en su chacra a Jorge Larrañaga y se comprometió a integrar los entes autónomos con la oposición sin condicionamientos. El presidente electo confirmó que distribuiría los puestos entre blancos, colorados e independientes.

29/12. Quedan instaladas las cuatro comisiones de trabajo interpartidarias en Medio Ambiente, Educación, Seguridad y Energía en la Antesala de la Cámara de Senadores. Durante el acto, el entonces presidente electo, José Mujica, afirmó: “Le vamos a pedir a la oposición que ocupe los cargos que le corresponde para que nos controle”.

2010

18/01. Comienzan a sesionar las comisiones de Medio Ambiente, Educación y Seguridad, también con la presencia de Mujica. La de Energía hará lo propio dos días después.

05/02. Jorge Brovetto anuncia que el Frente Amplio creó una comisión de senadores, encabezada por Danilo Astori (e integrada por Lucía Topolansky, Enrique Rubio y Daniel Martínez) para discutir la integración de los organismos públicos con la oposición. Los líderes blancos Luis Alberto Lacalle y Jorge Larrañaga reclaman que las negociaciones deben ser con Mujica.

22/02. Se inician las negociaciones. “Hay casos más fáciles, de directorios de tres, en los que van dos representantes del gobierno y uno para la oposición, y de cinco integrantes en los que van tres y dos, pero también hay otros que son de mayor complejidad, con representantes elegidos por su extracción social, que habrá que analizar específicamente en este grupo”, dijo Astori tras la primera sesión, a la que asistieron 12 delegados de los cuatro partidos con representación parlamentaria.

23/02. El entonces presidente, Tabaré Vázquez, calificó de “excelente” la iniciativa y admitió que él no tuvo éxito en la negociación de cargos públicos al inicio de su gestión. Le deseó “el mayor de los éxitos” a Mujica y afirmó que a su juicio es posible “avanzar un paso en esto”, que “es trascendente, importante y necesario”.

10/04. Los delegados del gobierno y los de la oposición definen que “el universo de cargos” que no ocupará el Frente Amplio es de 56.

12/04. Partidos presentan acuerdo por el cual crearán una entidad para menores infractores fuera del INAU y se reformará la carta orgánica del BROU.

25/05. Los partidos opositores acuerdan que la Comisión Administradora del Río Uruguay no quedará para el Partido Independiente sino para el Partido Colorado.

22/05. La Convención Nacional del Partido Colorado aprobó el informe de lo actuado por Ope Pasquet, José Amorín y Germán Cardoso en las comisiones multipartidarias promovidas por el gobierno y faculta al Comité Ejecutivo Nacional a la concreción definitiva para proveer los cargos que se ocuparán en los entes autónomos y organismos descentralizados.

27/05. Blancos y colorados cierran las tratativas bilaterales. Lacalle acuerda con el colorado Pedro Bordaberry que el puesto en la Unidad Reguladora de los Servicios de Comunicación (Ursec) corresponde al Partido Nacional. Ésta fue la última dependencia en la cual los partidos tradicionales lograron consenso.

05/06. Mujica opina a través del Portal de Presidencia y destaca: “Dada la relación de fuerzas en el Parlamento, ningún partido estaba en condiciones de exigir una participación como ésta”, por lo que se declaró “orgulloso” de haber impulsado la integración opositora a los organismos públicos en pos de la transparencia.

Mientras el Frente Amplio (FA) y el resto de los partidos mostraban públicamente el álbum de fotos sacadas en el transcurso de la luna de miel que significó ponerse de acuerdo en la integración de las dependencias públicas, algunas autoridades del gobierno expresaron a la diaria su preocupación y en algún caso desconcierto por la designación del ex diputado Alberto Scavarelli en el directorio del SODRE. El problema no es personal, sino que se hizo ver que esa dependencia cuenta con tres directores que ya fueron impuestos por el Poder Ejecutivo: Fernando Butazzoni, Jorge Bruni y Ariel Cazes.

La subsecretaria del MEC, María Simon, se reconoció sorprendida por la noticia y anunció que buscará obtener más información para analizar con Presidencia cómo se solucionará la cuestión. Butazzoni prefirió no pronunciarse públicamente, mientras que Bruni asumió que estaba en conocimiento del tema aunque reconoció que desconoce cuál será la salida. El senador Enrique Rubio, principal negociador del oficialismo, aportó algún indicio al decir que la senadora Lucía Topolansky tenía una fórmula de salida.

Fuentes del SODRE no descartaron que la solución sea aumentar nuevamente a cinco la cantidad de integrantes del directorio, aunque en ese caso habría que resolver quién ocuparía el quinto lugar. Siguiendo la lógica negociadora, en las entidades con cinco miembros el FA tendría mayoría de tres y blancos y colorados ocuparían las otras sillas. A mediados de marzo, el Partido Nacional había criticado que el oficialismo ocupara los tres puestos. Luis Alberto Lacalle consideró que se trataba de “una muy mala señal no reconocer a la oposición” en el SODRE. Otras fuentes del organismo expresaron incertidumbre por lo que significaría un eventual incremento de los directores, aunque no desecharon la posibilidad de que el oficialismo reduzca su presencia en la insitución.

Iujuuu, lo logramos

Más allá del SODRE, ayer la clase política parecía estar de fiesta por haberse puesto de acuerdo en cómo gestionar el Estado. No faltó casi nadie a la cita en el Palacio Legislativo, excepto los ex presidentes y los representantes de Asamblea Popular. Senadores, diputados, ministros, colaboradores de las comisiones multipartidarias y autoridades de los cuatro partidos con representación parlamentaria se mezclaron, apretados, en un conjunto de sillas que daban a una gran mesa. Habían sido convocados para las 16.00 y la puntualidad también estuvo presente, como dando a entender que realmente se trataba de algo distinto.

De frente hacia la platea se sentaron el presidente de la República, José Mujica; el vicepresidente, Danilo Astori, y las autoridades máximas de cada fuerza política, salvo del PN, cuyo presidente del directorio está en Estados Unidos y fue reemplazado por Jorge Larrañaga, presidente de su agrupación parlamentaria. El Frente Amplio (FA) estuvo representado por su presidente, Jorge Brovetto; el Partido Colorado (PC) por su secretario general, Pedro Bordaberry, y el Partido Independiente por su presidente, Pablo Mieres.

Visitantes y periodistas se colocaron rodeando la improvisada tribuna de sillas, especialmente los últimos, que se amontonaron contra los parlantes, para poder registrar los discursos que se venían, tal como anunciaba un funcionario del Palacio que micrófono en mano comenzó por enumerar a los oradores. El primero en ser nombrado fue Astori, que fue aplaudido tras la iniciativa del líder del Nuevo Espacio, Rafael Michelini, que en cambio decidió no arengar cuando se mencionó a Bordaberry. Tras las presentaciones de rigor se leyó una declaración firmada por los cuatro partidos, en la que expresan su “beneplácito” por las iniciativas consensuadas en medio ambiente, seguridad, energía y educación, que “constituyen bases importantes para la generación de políticas públicas” y que “permitirán definir y consolidar rumbos que trasciendan la temporalidad de los períodos de gobierno”. También se califica como un “acuerdo de gran relevancia” el cierre que tuvo el proceso de integración de los organismos de contralor, elevado al rango de “paso muy importante” para “fortalecer el funcionamiento del sistema democrático y la transparencia de la gestión de gobierno”.

En cuanto a la presencia de la oposición en organismos del Estado -que fue lo que más tiempo llevó-, los partidos reiteran su satisfacción por lo logrado y expresan el “mayor compromiso en la dirección de que estos puntos de encuentro repercutan en acciones de beneficios para el país y el conjunto de la ciudadanía”.

Visión académica

Consultada por la diaria sobre la magnitud de lo ocurrido ayer, la politóloga Verónica Pérez resaltó que este hecho “es distintivo”, ya que se trata de “la primera vez que todos los partidos con representación parlamentaria integran cargos de gobierno”. Recordó que si bien en el primer período de Julio María Sanguinetti (1985-1990) se había dado una instancia multipartidaria, el FA había tenido una “participación marginal”, y que esa realidad se debía a una coyuntura especial, como lo era la salida de un gobierno de facto.

En las administraciones venideras (1990-2005), “el reparto de cargos siempre fue entre blancos y colorados” y “en la administración de Tabaré Vázquez “estos puestos fueron todos de un solo color, ya que sus negociaciones con la oposición fracasaron”. En opinión de Pérez, el hecho de que el gobierno de Mujica, teniendo mayorías parlamentarias, ofrezca cargos “no es minimizable”, ya que se podía interpretar de su discurso una apuesta para un “consenso nacional y de acuerdos macro en algunos temas, que superan las divisiones partidarias”.

Sin embargo, la cientista política considera que lo que esta situación también reflejó es que “se reflotó la puja de sectores y de partidos por los cargos, sin que exista una discusión profunda acerca de los criterios por los que esos cargos deben ser ocupados. El criterio termina siendo el partido que puja por ellos, y éste también fue el criterio con el que Mujica armó su gabinete”. Pérez sostuvo que Mujica obtuvo resultados gracias a su liderazgo y a su idea de “un posible consenso nacional por encima de todas las cosas”. De hecho esto fue lo que remarcó el presidente antes de cerrar el álbum de fotos y poner fin a la velada.

Sin condiciones

“El sistema político de Uruguay no puede darse algunos lujos que históricamente se ha dado. Ya no tiene tiempo porque el mundo rico viene al galope, atropellando por todas partes, y nosotros necesitamos un sólido margen de unidad nacional para tratar de sacar el mayor partido posible para el destino de nuestra gente”, dijo Mujica y advirtió que “esta invitación” es “una responsabilidad a cargar con la responsabilidad que tenemos encima, y esta responsabilidad no es del partido que ganó, sino de todo el sistema político”.

“No puede fracasar la democracia representativa, porque es ella la que tiene que dar respuestas en esta época y no tiene todo el tiempo del mundo”, insistió. Cuando los aplausos ya se intuían, el mandatario aprovechó para filosofar sobre la “necesidad de renovar” y dijo que ésta no tiene sentido si “no se renuevan las ideas y los métodos”. Y como lo había hecho en diciembre de 2009 cuando se comprometió con Larrañaga a sumar a la oposición al gobierno, explicó que esta negociación no fue a cambio de algo: “Te lo tengo que ofrecer sin condiciones y vos contarás lo que tendrás que poner a nivel de tu conciencia. Porque éste es un país pequeño pero nadie se banca la pechera. Entonces tenemos que tener gestos de apertura y de grandeza: acá no hay condiciones, la única condición es un compromiso común”. Y todos dijeron: “Sí, quiero”.

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