Los renunciantes, en su mayoría ingenieros agrónomos y responsables del área social del PUR, divulgarán esta semana un documento para fundamentar públicamente la decisión, que desmantela las principales gerencias del programa, a seis meses de su cierre. En especial están molestos porque las autoridades del MGAP no han informado cuáles son las causas para no extender el vínculo laboral con Vadell. “No sabemos si es un cambio de rumbo de la gestión del MGAP o una desaprobación tácita al trabajo realizado, pero el problema es que nadie explica qué está pasando y por eso damos un paso al costado”, dijo a la diaria uno de los profesionales.
El director del PUR intentó desde el 1º de marzo entrevistarse con el ministro Tabaré Aguerre para presentar al equipo y describir el trabajo efectuado estos años, pero nunca fue recibido, según comentó a este medio el 8 de setiembre. “Con Vadell no trabajo, se va él o me voy yo”, habría respondido el titular del MGAP, de acuerdo con lo publicado por La República tres días después de la salida del director del PUR. Estos episodios han sido analizados con atención en las direcciones del MPP y el MLN, ambas organizaciones que integra Vadell. “¿Qué trayectoria tiene en la izquierda? Ninguna que se sepa”, afirmó el tupamaro Julio Marenales, en el libro de reciente aparición que lo tiene como protagonista, cuando se refirió al ministro Aguerre, un independiente dentro del FA.
Paralelamente, las organizaciones sociales beneficiarias del PUR comenzaron a mover sus fichas. Sindicatos rurales y productores lecheros de Cerro Largo iniciaron una juntada de firmas en respaldo al equipo saliente del PUR y pretenden trasladar la movida a otras zonas del país. “Es una pena que se caiga el programa, que ha ayudado a las organizaciones de trabajadores como nadie. Esto se contradice con la supuesta política de Estado para que la gente vuelva al campo. Y si el MGAP quiere con esto mandar una señal de cómo serán sus políticas, nos parece lamentable”, argumentó Marcelo Amaya, del Sindicato Único de Trabajadores del Arroz y Afines, que tiene un convenio con el PUR para fortalecimiento institucional (incluye viáticos para los Consejos de Salarios y fondos para talleres de formación sindical).
Por su parte, Edison Aldao, secretario ejecutivo de la Sociedad de Fomento de Tala y directivo de la Comisión Nacional de Fomento Rural, considera que a raíz de esta incertidumbre en el PUR el apoyo a los pequeños productores “queda en el aire” y no aparecen “señales concretas” de que el MGAP vaya a continuar con el financiamiento para el sector. “Los productores quedamos en un punto muerto y todas estas renuncias nos generan sorpresa, porque es todo un conocimiento acumulado que perdemos. El problema es que la realidad de mucha gente queda postergada por los personalismos políticos”, se lamentó el gremialista.