Desde el comienzo de su gestión, la relación entre el MPP y el prosecretario de la Presidencia, Diego Cánepa, fue de desconfianza mutua. Integrantes del sector confiesan que están “enojados” porque hubieran preferido que un emepepista ocupara ese lugar. Reconocen que Cánepa oficia hoy como “mano derecha de Mujica”, y el MPP quería tener “la mano derecha mucho más cuidada”.
No comparten su forma de manejarse con la prensa. “Tiene una tendencia a querer salir [en los medios] permanentemente. Cuando sale lo hace bien, pero es demasiada exposición y en estos últimos momentos nos calentaron algunas expresiones suyas”, afirmó una fuente del sector. Las fuentes señalaron que a Cánepa le tienen “aprecio” pero el problema es que “no tiene una postura alineada” con el MPP. “Eso nos molesta porque nosotros teníamos gente nuestra para ahí, había compañeros muy capacitados” para ejercer ese rol, reclamaron. Consideraron además que el prosecretario debe ser un articulador político, y que eso “no se da”.
A principios de noviembre, integrantes del Ejecutivo del MPP se reunieron con Mujica para plantearle el tema. “Si están desconformes, mándenme a otro”, les respondió Mujica, y destacó la eficiencia y el buen manejo de la prensa de Cánepa.
Se volvió a conversar del asunto en un encuentro entre los mismos actores a fines de diciembre. En esa oportunidad los emepepistas propusieron que Cánepa fuera designado embajador u ocupara la titularidad del departamento de Asuntos Consulares y Vinculación de cancillería, y que en su lugar ingresara Baráibar, que pertenece al MPP. “Es cercano a Pepe pero además articula muy bien con la fuerza política y es un referente del sector para generar un vínculo concreto con el viejo [Mujica], que hoy no existe”, apuntaron las fuentes.
Cancillería no está al tanto de la propuesta. Según aseguran los emepepistas, Mujica “accedió aunque no de muy buena gana” a la solicitud, pero fuentes de Presidencia consultadas por la diaria negaron que se esté pensando en un relevo. Fuentes allegadas a Cánepa aseguraron que todas las señales que da Mujica van en sentido contrario. “Continuamente le está dando mayores responsabilidades en todos los temas de gobierno”, afirmaron. Cánepa participó en la redacción del presupuesto y en la definición de la norma de televisión digital, es el encargado de marcar las principales líneas de la reforma del Estado junto con el secretario de la Presidencia, Alberto Breccia, y participa en todas las reuniones que Mujica mantiene con los intendentes y con los jerarcas de entes autonómos. Las fuentes indicaron que el protagonismo de Cánepa se debe a que “se lo da el presidente, que cada vez otorga más responsabilidades, y él tiene que salir a hablar sobre las áreas de acción en las que participa”.
Opinaron que Mujica no quiere cerca a nadie de la orgánica del MPP para no “atarse”, y consideraron que hay un operativo del Frente Liber Seregni (FLS) y del MPP en contra de Cánepa.
De todas partes
El MPP no es el único sector del Frente Amplio que desea el alejamiento de Cánepa de su cargo. El NE, al que pertenecía Cánepa, está molesto con el prosecretario porque sospecha que está “influyendo en Mujica” y “operando para mantener a gente del NE lejos de algunas reuniones”. Desde el NE ponen como ejemplo una reunión que organizó Mujica con los cabezas de lista del FA, a la que “no invitaron a Rafael Michelini”, líder del sector. El NE considera que Cánepa influyó en Mujica para que no invitara a Michelini, alegando que el FLS ya estaba representado por el vicepresidente Danilo Astori. También señalan diferencias entre Cánepa y el ministro de Economía, Fernando Lorenzo. El País informó ayer, citando fuentes allegadas al secretario de Estado, que Cánepa realiza una “campaña de desgaste” contra Lorenzo porque “tiene un problema personal con el ministro de Economía desde hace años, cuando ambos pertenecían al NE”. En esa campaña incluyen acciones como bloquear expedientes, filtrar determinadas informaciones a la prensa y protagonizar “operaciones políticas”, aunque fuentes del NE consultadas por la diaria consideraron que la situación “no llega a esos extremos”.
En el Partido Socialista, en tanto, consideran que Cánepa “habla demasiado a veces”, que en su momento se le cuestionó “la forma en que presentó el articulado presupuestal”, pero que eso no quiere decir que estén pidiendo el relevo del prosecretario.
Cánepa tuvo que dar explicaciones en dos ocasiones por presuntas declaraciones que formuló en reuniones que mantuvo con el fiscal de Corte, Rafael Ubiría, y con las Madres de la Plaza. En el primer caso, a fines del año pasado, Ubiría afirmó que Cánepa le había dicho que mientras él actuara como fiscal de Corte no habría “un solo peso para el Ministerio Público”. Cánepa desmintió estas acusaciones calificándolas de “chusmerío barato”. En el segundo caso, que se produjo en noviembre del año pasado pero se conoció dos semanas atrás, las Madres de la Plaza sostuvieron que Cánepa les habría dicho en una reunión que mantuvo con ellas que las bocas de pasta base no se cierran porque “aumentaría el desempleo”. El prosecretario también desmintió estas afirmaciones.