No sólo de los “paraísos” se ocupó el presidente francés, Nicolás Sarkozy, en Cannes. En el arranque de la cumbre del G20, el jueves, durante una conversación con su par estadounidense Barack Obama, que se filtró a algunos periodistas que aguardaban que los mandatarios los atendieran al final de un encuentro bilateral.
El presidente francés le confió a Obama, en referencia al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, que “¡ya no lo puedo ver, es un mentiroso!”. Como respuesta recibió un, “¡tú estás harto, pero yo tengo que tratar con él todos los días!”.
El intercambio entre ambos, conocido ayer, no se difundió por ninguno de los medios presentes en la cumbre, sino a través de un portal francés, Arrêt sur images, especializado en analizar los contenidos de los medios. Hace unos años era un destacado programa de televisión, que tenía el mismo nombre y que fue sacado de la grilla del canal público France 5 en medio de una polémica.
Los dichos de Sarkozy y Obama llegaron a los oídos de los periodistas porque el personal de la presidencia francesa que entregó las cajas que permiten seguir la traducción simultánea tuvo la desgracia de explicar que los auriculares aún no se repartían, para evitar que pudieran escuchar lo que hablaban a puertas cerradas, explicó Arrêt sur Images. Acto seguido, unos seis periodistas enchufaron sus auriculares personales y, hasta que el responsable de la organización se dio cuenta, pudieron oír unos tres minutos de franco intercambio sobre el conflicto entre Israel y los palestinos.
Posteriormente hubo discusiones entre quiénes habían accedido a la conversación, pero también en las redacciones de distintos medios, acerca de qué hacer. Se resolvió no difundirla, entre otros motivos porque el tema “es un poco delicado” y porque “estamos atados a reglas de deontología”, alegó una de las fuentes anónimas del portal.
Antes de opinar sobre Netanyahu, los periodistas fueron testigos de cómo Obama reprochó a Sarkozy que no le haya advertido antes que Francia votaría a favor, el 31 de octubre, del ingreso de Palestina en la UNESCO como miembro pleno. Y después le pidió que insistiera ante los palestinos para que moderen su posición en su intento de lograr el mismo estatus en la Organización de Naciones Unidas.