Bajo el lema “Educación sexual para decidir, anticonceptivos para no abortar, aborto legal para no morir”, la Campaña por el Derecho al Aborto Seguro, Legal y Gratuito cuenta con el apoyo de legisladores y de organismos como el Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo.
Poner fin a los abortos clandestinos para evitar muertes es el objetivo que 39 diputados persiguieron al firmar ese proyecto que es colectivo y surgió del diálogo en el que participaron 350 organizaciones y 16 universidades nacionales. Además de los firmantes, hay unos 50 legisladores de distintos bloques -del oficialista Frente para la Victoria, la Unión Cívica Radical, el Partido Socialista, Generación para un Encuentro Nacional, la Coalición Cívica y el Nuevo Encuentro, entre otros- a favor de ese proyecto que defiende la despenalización total de la interrupción del embarazo hasta las 12 semanas de gestación. También establece que ésta sea practicada en los servicios de salud pública, y que sea una prestación más de las obras sociales y de la medicina prepaga.
El proyecto agrega que “fuera de ese plazo establecido, toda mujer tiene derecho a decidir la interrupción del embarazo en los siguientes casos: si el embarazo fuera producto de una violación, acreditada con denuncia judicial o policial o formulada en un servicio de salud; si estuviera en riesgo la salud o la vida de la mujer; si existieran malformaciones fetales graves”.
Entre los siete textos relativos al aborto que están a consideración en el Congreso argentino, otro que se destaca y comenzó a ser discutido ayer lleva la firma del presidente de la comisión de Legislación Penal, el diputado Juan Carlos Vega, de la Coalición Cívica, y de Oscar Albrieu, del Frente para la Victoria. Su objetivo es ampliar las posibilidades de interrumpir el embarazo de forma legal en determinados casos que ya están previstos por el Código Penal -riesgo de vida o de salud para la madre, lo que se denomina aborto terapéutico-, y agregar el caso de los embarazos surgidos de violaciones. Pero agrega que en cualquiera de esas circunstancias la intervención debe realizarse antes de que se cumplan las 12 semanas de embarazo. Esto último marca un endurecimiento de la legislación, ya que hasta ahora la ley no prevé un límite de ese tipo para el aborto terapéutico.
De acuerdo al diario argentino La Nación, estos proyectos representan las dos grandes tendencias: la primera apunta a la legalización total y la otra a la parcial.
Como ya fue el caso durante el colorido debate sobre el matrimonio entre personas del mismo sexo, aprobado en Argentina el año pasado, los sectores religiosos están en alerta. En esta oportunidad, estiman que el aborto es un atentado a la vida, opinión que comparten unos cuantos diputados de distintos partidos.
También hubo polémica porque los defensores de la despenalización total estiman que el proyecto del diputado Vega es aun “más restrictivo” que la legislación actual.
El debate empezó ayer de tarde en la Cámara de Diputados, en la comisión de Legislación Penal, y contó con la presencia de una multitud de manifestantes en contra y a favor del aborto, dentro y fuera del Congreso, en Buenos Aires.
La diputada Cecilia Merchán, que es activista a favor del aborto, emitió un comunicado en el que estimó que “el solo hecho de que se discuta en el Congreso de la Nación este tema, históricamente cajoneado, es de por sí un motivo para celebrar”. Agregó que el proyecto de ley colectivo que será estudiado “es un ejemplo de construcción ciudadana y democrática”, en el que se recoge “la mayor parte del debate que exige la sociedad”.
Según la legisladora, la iniciativa que defiende “es un proyecto por la dignidad de todas las mujeres y defiende la vida en sentido amplio, porque plantea un abordaje desde la educación sexual, la importancia de la anticoncepción y el aborto para que no sigan muriendo” mujeres.
Desde ayer, el tema irrumpió con fuerza en la opinión pública y los legisladores coinciden en que acaban de empezar varios meses de debate.
Según el diputado Vega, se esperaba que surgieran ayer dos dictámenes, uno en mayoría y otro en minoría, y que luego, antes de que el plenario aborde el tema, éste sea discutido en la comisión de Familia. Pero según el legislador, la comisión de Legislación Penal “es la punta de lanza” porque “es el primer paso que da el Congreso argentino sobre este tema”.
De acuerdo a una encuesta realizada para la Campaña por el Derecho al Aborto Seguro, Legal y Gratuito, publicada por la agencia de noticias Télam, 81% de los argentinos apoya una reforma relativa al aborto si la vida o salud de la mujer está en riesgo y 80% si es producto de una violación, pero si se trata de una simple decisión personal el apoyo desciende a 45%.