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Pedro Bordaberry. (archivo, febrero de 2011)

Foto: Victoria Rodríguez

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PC analiza hoy abandonar cargos públicos; Lacalle se opone ya que son un “contralor fundamental” ante “una mayoría absoluta”

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La propuesta hizo que se “cayera el estadio”, ilustró el diputado de Vamos Uruguay (VU) Gustavo Cersósimo. Ésa fue la reacción del Comité Ejecutivo Ampliado del sector, tras escuchar la idea del senador Pedro Bordaberry de retirar a los directores colorados de los diferentes organismos del gobierno, exceptuando a los de contralor: el Tribunal de Cuentas y la Corte Electoral.

Para los colorados la gota que derramó el vaso no fueron las declaraciones de la senadora emepepista Lucía Topolansky acerca de que la oposición debía “retirarse” de esos cargos si estaban disconformes con la gestión del gobierno, sino los comentarios irónicos del presidente José Mujica, quien el miércoles aseguró que no removería a los directores de la oposición para no “condenarlos” a la “desocupación”. La secretaria general del partido, Martha Montaner, calificó sus declaraciones de “soberbias” y “humillantes”.

La idea ya se manejaba en la interna del sector. Hasta el sábado no había sido propuesta en ningún ámbito orgánico, aunque había sido conversada entre varios legisladores. Un día antes de materializar la propuesta, Bordaberry había mantenido contactos con los directores pertenecientes a su sector, a quienes les planteó la situación.

Sin reservas

VU propondrá hoy que el PC impulse proyectos de ley para buscar “que se asegure a la oposición y todos los uruguayos el acceso a la información sobre el Estado”, explicó ayer el senador Bordaberry en una columna de opinión. Según explicó Montaner, hoy en el Comité Ejecutivo Nacional no habrá proyectos concretos, sino que se buscará decidir qué legisladores trabajarán en su elaboración.

Aunque no en todos los casos hay “propuestas acabadas”, el senador Ope Pasquet explicó los principales contenidos: definir los plazos para los pedidos de informes (para lo cual el legislador ya presentó uno), “acotar” el uso de la declaración de confidencialidad, reserva o secreto de la información y “jerarquizar” la integración de la Junta de Transparencia y Ética Pública, “exigiendo una mayoría parlamentaria especial para darles venia a integrantes de la comisión, que obligue la integración plural de este cuerpo, pero que además le dé una mayor jerarquía”.

La propuesta será debatida hoy en el Comité Ejecutivo Nacional del Partido Colorado (PC). VU apuesta a que la medida sea aprobada por unanimidad, aunque el segundo sector del partido, Propuesta Batllista (Proba), coliderado por los senadores José Amorín y Tabaré Viera, todavía no manifestó su apoyo y resolverá hoy su postura final. “A priori ni Bordaberry ni yo compartíamos esto, porque habíamos dicho públicamente que si no nos quieren en los entes y las empresas públicas nos deben echar”, dijo Amorín ayer a El País.

De cualquier manera, VU ya tiene definido que sus directores pondrán “a disposición” del gobierno sus cargos, al presentar su renuncia. Sin embargo, la agrupación mayoritaria del PC no utilizaría sus mayorías para imponerles su decisión a los demás sectores, según estimaron varios legisladores. Los colorados tienen en total 15 cargos públicos, de los cuales tres pertenecen a organismos de contralor. La mayoría de esos cargos fue designada por VU.

En relación

La idea de Bordaberry se planteó exactamente una semana después de que el sector mayoritario del Partido Nacional (PN), Unidad Nacional (Una), calificara al actual gobierno de “totalitario”, en una declaración que manejó, entre otros argumentos, los dichos de la senadora Lucía Topolansky. El diputado Fernando Amado (VU) rechazó la declaración de estos nacionalistas comentando que le pareció “absolutamente infeliz” usar “términos que no condicen con la realidad política”. No obstante, aclaró que la postura de su sector no tuvo ningún tipo de relación con la declaración de Una.

En tanto, el senador y líder de Una, Luis Alberto Lacalle, dijo ser “contrario” a que los directores del PN dejen sus cargos, aunque advirtió que la resolución final la tomará el directorio nacionalista. El ex presidente dijo que la presencia de directores de la oposición en organismos del Estado constituye “contralores fundamentales, sobre todo en las circunstancias en que estamos, en las que hay una mayoría absoluta que evita cualquier consecuencia de una interpelación, así como las comisiones investigadoras”, por lo cual estos cargos permiten “un control presencial importante”. Lacalle recordó, además, que la “coparticipación” es una conquista histórica del PN durante la vida política del siglo XX.

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