La campaña para las elecciones británicas del 8 de junio se retomó esta semana, después de que fuera suspendida durante varios días por el ataque terrorista en el Manchester Arena, que causó la muerte de 22 personas. El regreso de la campaña llegó con una sorpresa: según una encuesta de la firma YouGov, los laboristas, liderados por Jeremy Corbyn, acortaron la distancia con respecto a la primera ministra, Theresa May, del Partido Conservador.
La encuesta realizada por YouGov y publicada por el diario The Times es la primera que proyecta resultados para cada uno de los distritos, y de este modo estima qué diputados serán electos en cada uno de ellos y cómo quedará conformado el Parlamento. Según el estudio de YouGov, la bancada conservadora perderá 20 diputados y pasará de 330 diputados a 310, mientras que la del Partido Laborista crecerá en 28 escaños, y pasará de 229 a 257. El resto de las bancas se dividirían entre otros partidos minoritarios.
Con estos números, los conservadores no sólo perderían algunos diputados, sino también la mayoría en la cámara baja, de 650 escaños. La mayoría con la que cuentan los tories hoy en el Parlamento es la que obtuvo en 2015 David Cameron, cuando fue reelecto primer ministro con la promesa de convocar a un referéndum sobre la salida de Reino Unido de la Unión Europea (UE).
Al no tener mayoría, los conservadores deberían buscar una alianza con otro partido para mantenerse en el gobierno, y hacer concesiones a ese socio en el acuerdo del brexit, algo que no estaban obligados a hacer con la mayoría actual. Si ganan las elecciones, tienen asegurado el primer turno para intentar formar gobierno, pero si no consiguen un aliado sería el turno de los laboristas, que podrían buscar un socio en los nacionalistas escoceses, que se convertirían en la tercera bancada, con 50 diputados.
Según sondeos publicados el fin de semana, los conservadores siguen siendo favoritos para ganar las elecciones, aunque su ventaja sobre los laboristas se reduce. De acuerdo con un estudio de la firma Opinium, May ganaría las elecciones con 45% de los votos, mientras que los laboristas obtendrían 35%, de forma tal que una ventaja de 13% se redujo a 10% en una semana. De manera similar, ComRes informó que la ventaja de los conservadores bajó de 18% a 12% en su encuesta, aunque sostiene que ganarían las elecciones con 46% de los votos.
Anoche todos los candidatos, excepto May, participaron en un debate en el que atacaron las políticas de gobierno y la fórmula del Ejecutivo para dejar la UE, aunque la salida del país del bloque regional no ha sido puesta en duda. Mayoritariamente, las críticas estuvieron dirigidas a los recortes dispuestos en los presupuestos del sistema de salud, del transporte público y el subsidio a la generación de energía, todas decisiones que implicaron un aumento en las tarifas de estos servicios para la población.