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Protestas contra la asistencia de Donald Trump, presidente de Estados Unidos, al Foro Económico Mundial de Davos, ayer, en el centro de Zúrich. Foto: Philippe Desmazes, AFP

Los líderes europeos cuestionaron el proteccionismo y el auge de los nacionalismos horas antes de la llegada de Trump a Davos

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Las tres economías más grandes de Europa –Alemania, Francia e Italia– se unieron para defender el “proyecto europeo” y abogar por el multilateralismo, unas horas antes de que el presidente estadounidense, Donald Trump, aterrice en Suiza para participar en el Foro Económico Mundial.

Los líderes europeos advirtieron ayer, ya en la ciudad de Davos, sobre el avance de los nacionalismos y las estrategias proteccionistas que defienden países como Estados Unidos y China. “Estamos viendo nacionalismo, populismo y, en muchos países, una atmósfera polarizada”, dijo en primer lugar la canciller alemana, Angela Merkel. “Creemos que el aislamiento no nos ayudará. Creemos que necesitamos cooperar, que el proteccionismo no es la respuesta”, agregó, antes de evocar las dos guerras mundiales y cuestionar: “¿Aprendimos algo realmente de la historia o no?”.

También el primer ministro italiano, Paolo Gentiloni, defendió la cooperación multilateral y dijo que, si bien “es totalmente legítimo” el “deseo de los líderes políticos de defender a sus propios ciudadanos, a sus propias empresas y a su propia economía”, “obviamente hay un límite”. En la única referencia directa que hubo al gobierno de Trump en la jornada, Gentiloni reconoció que el papel de Europa no es “opinar sobre lo que el presidente de Estados Unidos hace”, sino “hacer lo que Europa necesita hacer y tener el papel político y económico que Europa tiene que tener” en el mundo como “enorme fuerza comercial y económica”. En la misma línea, dijo que Europa tranquilamente “puede llenar el hueco” que dejen otros países que abandonen acuerdos estratégicos o sistemas multilaterales, aunque sólo si reacciona rápidamente. Se refería sin dudas a Trump, quien desde que llegó a la Casa Blanca –hace un año– se retiró de varios acuerdos comerciales y climáticos internacionales.

Poco después, el presidente francés, Emmanuel Macron, reconoció que la globalización no es perfecta, pero que, justamente, el “desafío” es construir un “nuevo contrato global”. “Vamos a rediseñar nuestra estrategia [europea] de aquí a diez años. Tenemos una responsabilidad frente a China y Estados Unidos”, agregó. Pidió más cooperación internacional, multilateralismo y diplomacia para luchar contra los “grandes problemas del mundo”, como el terrorismo y la amenaza nuclear de Corea del Norte.

Trump aterrizará hoy en Davos y mañana pronunciará un discurso en el que defenderá su cuestionada política de “Estados Unidos primero”. La Casa Blanca adelantó, sin embargo, que el presidente estadounidense intentará dejar claro que eso no significa “Estados Unidos solo” en el mundo y contra todos los demás.

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