La sala docente del liceo 36 –Instituto Batlle y Ordóñez (IBO)– y el núcleo sindical del liceo 50 –Profesor Jorge Chebataroff, de Casabó– emitieron en los últimos días sendos comunicados a la opinión pública para anunciar que se proponen ocupar esos centros en caso de no tener respuestas del Consejo de Educación Secundaria (CES) a diversos planteos.
Los docentes del IBO se reunieron en asamblea el viernes de la semana pasada y resolvieron ocupar el liceo mañana, martes 10, en reclamo de la creación de nuevos grupos para evitar la superpoblación; en particular, destacan que actualmente un sexto de Derecho tiene 47 estudiantes. Según señalan en el comunicado, en una reunión con una inspectora de la zona se le planteó el reclamo, “obteniendo como respuesta que la ‘posible solución’ sería trasladar 12 alumnos del sexto de Derecho al sexto de Economía, el cual cuenta con 26 estudiantes”. Los docentes opinan –y es difícil discutirlo– que con esa propuesta “no se atiende el perfil específico de cada orientación, lesionando los intereses y derechos de los estudiantes”, de modo que la propuesta que les planteó la inspectora, “en lugar de ser una solución, duplica el problema”.
El núcleo sindical del liceo 50, por su parte, reclamó que el CES designe a un equipo multidisciplinario en ese centro de estudio, que no cuenta en la actualidad con personal formado en psicología, psicopedagogía, trabajo social ni educación social, pese a que “la población estudiantil sufre situaciones de extrema vulnerabilidad socioeconómica”. Por otra parte, los sindicalistas, integrantes de la Asociación de Docentes de Enseñanza Secundaria reclaman porque el liceo no cuenta con lo necesario para el cumplimiento de las tareas cotidianas, por ejemplo, hojas de papel o una adecuada conexión a internet. Esto último, a su vez, dificulta la tarea de los adscriptos en el uso de la libreta electrónica, que es optativo para quienes realizan tareas de docencia directa, pero ineludible para el personal de adscripción; “es decir que algunos trabajadores deben utilizar una herramienta que el propio Consejo no proporciona”, reprocha el núcleo. Por último, demanda que se lleve a cabo un relevamiento de problemas edilicios y que se hagan las reparaciones necesarias, como las de “filtraciones de agua cercanas a instalaciones eléctricas y problemas en la azotea”. El comunicado fija el mediodía de este jueves como “plazo máximo para recibir respuesta favorable” a los planteos, y anuncia que, si esto no ocurre, el liceo será ocupado el lunes 16 de abril.