El presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abás, se dispone a conformar un nuevo gobierno después de aceptar la renuncia del primer ministro, Rami Hamdallah, y de todo el gabinete. La figura de Hamdallah había sido elegida en 2017 para liderar un gobierno de unidad entre el partido Al-Fatah y el movimiento islamista Hamás, pero ese objetivo no llegó a alcanzarse. El anterior gobierno de las dos facciones palestinas naufragó en 2007.
“Abás iniciará negociaciones con los partidos de la Organización para la Liberación de Palestina [OLP]”, liderada por Al-Fatah, “para reformar el gobierno de cara a la preparación de unas elecciones legislativas”, manifestó la ANP en un comunicado que difundió la agencia de noticias Wafa.
Sin embargo, para Hamas, Al-Fatah impulsó este cambio para evitar esas elecciones y para excluir a ese movimiento de un nuevo Ejecutivo. Así lo afirmó Husam Badran, uno de los integrantes del Buró Político de Hamás. Según informó la agencia Efe, el dirigente dijo que el partido de Abás “rechaza formar un gobierno de unidad nacional y convocar elecciones”, y agregó que este paso de Al-Fatah “refleja su monopolio de poder y unilateralismo”.
Se desconoce quién va a liderar el nuevo Ejecutivo. Una posibilidad es que lo haga Saeb Erekat, jefe negociador palestino y secretario de la OLP. También sonaba ayer el nombre de otro político de larga trayectoria, Mohammad Shtayyeh. Mientras el nuevo gobierno no se conforme, Hamdallah se mantendrá en el cargo de primer ministro.
Otros focos de tensión mostraron esta semana la distancia que mantiene Al-Fatah con Hamás y con el primer ministro. Uno de ellos fue la decisión de Abás de suspender, el lunes, un proyecto de ley de la seguridad social que el Ejecutivo liderado por Hamdallah había decidido implementar, y que generó paros y manifestaciones en contra. Esa iniciativa, informó Efe, disponía que las empresas retuvieran una parte de los salarios de sus trabajadores para alimentar un fondo social. El mismo lunes, antes de presentar la renuncia, Hamdallah anunció que ponía su cargo a disposición de Abás.
Por otra parte, ese mismo día, el líder de Hamás, Ismail Haniya, rechazó la invitación del gobierno ruso a participar en una ronda de consultas en Moscú entre sectores palestinos. Pese a su negativa, las consultas para este encuentro se llevarán adelante del 11 al 13 de febrero, dijo el embajador palestino en Moscú, Abdel Hafiz Nofal. El funcionario declaró a la prensa que sí estarán presentes las demás facciones palestinas y que el encuentro forma parte de “la iniciativa rusa para la conciliación” entre ellas. Ahora, sin la presencia de Hamás, uno de los principales movimientos, esos encuentros “tendrán un rango menor”, dijo Nofal.