La insólita postura del presidente estadounidense Donald Trump, quien permanece firme en su postura de no reconocer la victoria de su oponente Joe Biden, sigue sumando nuevos capítulos, a medida que lentamente se acerca la fecha del 20 de enero, día marcado para que el demócrata asuma el control del Ejecutivo.
En una entrevista emitida este domingo por la cadena Fox, Trump expresó que sus intentos de revertir el resultado de las elecciones “no terminaron”. En la entrevista que fue grabada el sábado, uno de los periodistas le preguntó al líder republicano si sus impugnaciones a los resultados electorales habían “terminado” después de que la Corte Suprema rechazara el viernes una demanda de Texas que buscaba invalidar los resultados en cuatro estados –Georgia, Michigan, Pensilvania y Wisconsin– en los que se impuso Biden. “No, no terminaron. Seguimos adelante. Y vamos a seguir avanzando”, respondió Trump, de acuerdo a lo que consignó el diario estadounidense The Hill.
Trump también criticó al gobernador de Georgia, el republicano Brian Kemp, por negarse a discutir la victoria del presidente electo en el estado. Lo acusó de dañar a los senadores Kelly Loeffler y David Perdue en las elecciones del 5 de enero en dicho estado sureño, que determinarán qué partido se queda con el control del Senado. “Tenemos un gobernador, un gobernador republicano, que es peor que un demócrata. Es terrible, y está lastimando mucho a Kelly y David, los senadores, que son gente estupenda”, dijo Trump al respecto.
A pesar de las numerosas demandas presentadas por el republicano y sus asesores legales desde que supo que perdió las elecciones presidenciales del 3 de noviembre, expertos en cuestiones constitucionales, funcionarios electorales de muchos estados y hasta el fiscal general William Barr dijeron que no hay indicios de que haya existido un fraude generalizado en las elecciones, algo que Trump y su círculo más cercano siguen sosteniendo.
El clima de crispación política que se vive actualmente en Estados Unidos quedó de manifiesto una vez más en la noche del sábado en la capital, Washington. Al menos cinco personas resultaron heridas, cuatro con arma blanca y una de bala, luego de los enfrentamientos entre partidarios y oponentes de Trump, según informó The New York Times.
El diario neoyorquino consignó que, indignados por el rechazo de la Corte Suprema de la moción del estado de Texas sobre un posible fraude electoral, que frustró aún más las esperanzas de los republicanos de revertir la derrota electoral de Trump, miles de partidarios del presidente se movilizaron en Washington y otras ciudades del país para protestar contra lo que consideran que fueron unas elecciones “robadas”.
Algunas ciudades del país fueron escenario de peleas, sobre todo la capital, donde se registraron violentos enfrentamientos entre manifestantes, que derivaron en el apuñalamiento de cuatro personas y un herido de bala. Según la alcaldía del distrito de Columbia, los cuatro heridos se encuentran en estado crítico. Dos policías fueron hospitalizados con heridas, mientras que al menos 23 personas fueron detenidas, seis de ellas por haber agredido a agentes del orden.