El gobierno anunciará este miércoles el postergado ajuste de las tarifas públicas, luego de que el precio del dólar experimentara esta semana un crecimiento abrupto, que se mantiene. El secretario de Presidencia, Álvaro Delgado, explicó en conferencia de prensa que la “adecuación de tarifas públicas será en relación al costo”, y además se presentará una “serie de medidas” para “generar un plan de ahorro”, vinculado a la promesa de campaña del presidente, Luis Lacalle Pou, de reducir el gasto en 900 millones de dólares. Ese plan se realizará en base a “algunos decretos”.
Delgado señaló que el proceso de decisión se demoró, en parte, por la “volatilidad” del mercado, especialmente por la baja del precio del petróleo, que este martes experimentó un leve aumento. El secretario subrayó que el ajuste será distinto en cada empresa, ya que se tomarán decisiones para cada caso en función de los precios. Las variables que se tendrán en cuenta serán el precio del dólar, “el overshooting que se produjo en el día de ayer [refiriéndose al aumento abrupto del lunes] y el precio del petróleo”, explicó Delgado.
A modo de ejemplo, sostuvo que en el caso de los combustibles, en el que incide más la cotización del crudo, “va a haber un tratamiento muy diferencial” en la definición de los precios.
El lunes, luego de la intervención de casi 18 millones de dólares en el mercado del Banco Central del Uruguay (BCU), el dólar terminó cotizando a 43,45 pesos a la venta y 41,75 a la compra. Ese día, el mercado local tuvo una gran volatilidad. El dólar sufrió una suba abrupta y alcanzó en las primeras horas del día los 45 pesos, e incluso algo más en algunas casas de cambio. Este martes, la suba del dólar se moderó, pero la divisa siguió la tendencia al alza y cerró en 44,20 pesos a la venta y 42,50 a la compra.
CPA Ferrere advierte por aumento de la inflación
La consultora CPA Ferrere pronosticó que la crisis financiera global generada por la evolución y expansión del Covid-19, la enfermedad provocada por el coronavirus, podría generar en el país un aumento en la inflación de alrededor del 10% en el acumulado anual durante el segundo trimestre del año, por la depreciación del peso uruguayo.
En un informe de la consultora, se proyecta un escenario de “menor crecimiento y riesgo de deterioro de balance fiscal”, y un “aumento de competitividad”, pero “menor consumo” para el 2020. El texto aclara que la información disponible y el carácter “sanitario” de la naturaleza de la crisis “no permite calibrar con precisión los impactos definitivos del shock global sobre Uruguay”, pero “los hechos ocurridos hasta el momento” permiten esbozar estas conjeturas.
Sobre el aumento de la inflación, CPA agrega que el hecho “de que casi el 75% de los acuerdos salariales vigentes venzan a mediados de año puede tener dos tipos de consecuencias”; por un lado, “podrían habilitarse los correctivos salariales que están previstos en los convenios vigentes”, y por otro, “podría afectarse la negociación de la próxima ronda de Consejos de Salarios que se inicia en junio”. Actualmente, la consultora estima una inflación interanual de 8,3% a diciembre, pero revisará el pronóstico de “inflación al alza” en los próximos días.
El informe plantea que la devaluación de la moneda uruguaya “podría mejorar la ecuación de rentabilidad de los exportadores en el mediano plazo”, pero “tendrá un efecto negativo sobre el consumo privado en el corto plazo”, y esto traerá como consecuencia “un menor nivel de actividad”. En ese sentido, la consultora revisará “a la baja” la proyección de crecimiento para 2020 que había estimado en 2,3% (de los que 1,7% se corresponden a obras de infraestructura y construcción de UPM2).
CPA también plantea que la devaluación del peso uruguayo “es similar a la de los países de la región”, como es el caso de Brasil y Colombia, “pero superior a la de algunos competidores, como Nueva Zelanda y Australia”. Este escenario permitirá en el corto plazo producir “mejoras moderadas de la competitividad global de Uruguay (aunque en un mundo con menor demanda agregada y menor propensión a comerciar)”.
En diálogo con la diaria, el economista de Oikos Consultora, Pablo Moya, señaló que su consultora pronostica una inflación interanual a marzo cercana a 8,79%, mientras que antes de este escenario estimaba 8,4%. “No llegaría a 9%, pero pensando que esta vorágine del tipo de cambio se acomodará. No creemos que el tipo de cambio siga subiendo con variaciones como la de los últimos días”, expresó.
El economista señaló que la suba abrupta del tipo de cambio no sólo afectará la decisión del gobierno sobre el ajuste, sino que impactará sobre el índice de precios al consumo, por los bienes y servicios que se cotizan en dólares. Marzo “va a ser uno de los meses que [la inflación] va a tener un valor más allá del estacional y generará una suba en términos interanuales, y previo a esto estimábamos que podía haber una leve baja”, estimó.