En una conferencia de prensa realizada en la tarde de este viernes en la residencia de Olivos, el presidente argentino, Alberto Fernández, anunció una nueva prórroga de las medidas impuestas para combatir la propagación del coronavirus. Las disposiciones se extenderán hasta el 30 de agosto.
El mandatario, quien como es habitual compareció junto al gobernador bonaerense, Axel Kicillof, y el jefe de gobierno de la ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, explicó que actualmente “el problema ya no es el Área Metropolitana de Buenos Aires [AMBA]”, porque el virus “se ha diseminado en todo el país y la circulación alcanza a 14 provincias”.
Además, y al contrario de lo que había hecho en ocasiones anteriores, Fernández, no sin cierta molestia, evitó hablar de “cuarentena” y pidió a la ciudadanía que deje de usar ese término para referirse a las medidas que se están tomando para combatir la pandemia, que de acuerdo a cifras oficiales infectó a más de 276.000 personas y fue causa o coadyuvó a la muerte de 5.362. “Seguimos hablando de cuarentena sin que en la Argentina exista cuarentena, porque la gente circula, porque los negocios se han abierto y la actividad industrial ya está funcionando por encima de 90%”, indicó el mandatario, según consignó Página 12.
En ese sentido, el presidente aclaró que en este momento el cuidado individual y social “ya no depende de una decisión política de un presidente o un gobernador”. “No me gusta decir una cosa por otra, no estamos en condiciones de sentirnos con capacidad de disponer con quién me encuentro o no sin que ello suponga un riesgo para el que decide encontrarse o no y un riesgo para el otro”, puntualizó.
El líder del Frente de Todos dijo también que “nunca restringimos libertades, sólo cuidamos la salud de la gente”, y que estos meses, en los que se aplicó una cuarentena bastante rígida, sirvieron para “fortalecer el sistema de salud del AMBA, que por eso puede dar respuesta a todos, pero el número de contagios crece y los sistemas empiezan a mostrar grados de ocupación preocupantes”.
El mandatario pidió también que se entienda la dimensión del problema que se está atravesando. Agradeció a los trabajadores de la salud por su trabajo y “esfuerzo sobrehumano” para que el sistema sanitario siga en pie en medio de la crisis. “Quiero decirles que las medidas de cuidado que hemos tomado han servido, y quiero agradecerle a la inmensa mayoría de argentinos que han entendido el riesgo y hoy no salen a la calle sin barbijo y respetan la distancia social, y quiero agradecerles a los adultos mayores que se quedan en sus casas cuidándose, porque en la calle el virus está circulando”, agregó al valorar el acatamiento de las recomendaciones sanitarias.
Además, Fernández, de acuerdo a lo que informó la agencia Télam, mostró su satisfacción por la elaboración de la vacuna que Argentina realizará conjuntamente con México y contó que habló con el presidente de ese país, Andrés Manuel López Obrador, a quien le expresó “la inmensa alegría de que la historia haya puesto juntos” en ese rol a ambos países.
Kicillof: “Se va a terminar”
A su turno, Kicillof remarcó la importancia de seguir respetando las medidas de prevención para mitigar la propagación del coronavirus en la provincia, aseguró que se trata del “último esfuerzo”, porque “la vacuna llegará en unos meses”, y reclamó a la dirigencia política “no buscar votos ni cavar la grieta” con la cuarentena.
“Es difícil cuidar la salud y hacerlo con un coro permanente de los que conspiran, los que atacan y niegan todas las medidas. No es momento de buscar votos ni de cavar la grieta”, dijo Kicillof. El gobernador kirchnerista resaltó que “la vacuna cambió todo, porque una cosa era pensar que esto iba a ser eterno, [que se tendría que usar] el barbijo y el alcohol en gel durante años, y otra saber que en unos meses más” la gente podrá vacunarse “y esto se va a terminar”.