Un grupo de ciudadanos cubanos que ingresaron a Uruguay en calidad de refugiados y residen en el país se presentó el martes en la cancillería para entregar una carta con más de 100 firmas en la que solicitan que se retomen y agilicen los procesos de aprobación de las visas y trámites de residencia que quedaron trancados desde el inicio de la emergencia sanitaria. Aunque desde la apertura parcial de fronteras se retomaron algunos trámites de reunificación familiar, los refugiados alegan que aún hay “cientos de familias sin poder concretar el proceso” por no tener la visa.
En el documento, firmado por el Grupo de Familias Refugiadas en Uruguay, se pide “comprensión, cooperación y solidaridad” ante la situación que atraviesan estas familias, la mayoría de las cuales busca concretar la reunificación con los integrantes de los núcleos familiares que quedaron en Cuba, y algunos de ellos regularizar su situación. “Gracias a decisiones tomadas por la máxima dirección del país de flexibilizar las medidas iniciales implementadas, desde octubre de 2020 nuestras familias retomaron el trámite de reunificación; y aunque siempre muy agradecidos, aún existen cientos de familias sin poder concretar el proceso por no tener esa visa, que hasta el momento es imprescindible para lograr ese anhelo”, manifiestan.
“Miles de cubanos ya hace algunos años dejamos atrás nuestra pequeña isla para pertenecer a esta bendecida tierra labrada por manos migrantes. Nuestro principal objetivo: vivir decorosamente, aportar al país y regalarles a nuestros retoños un futuro mejor. Y para eso precisamos tener un estatus migratorio según lo que establece la ley”, continúa la misiva, en la que los migrantes afirman que desde el 13 de marzo, cuando la mayoría de los trámites quedaron paralizados, “a los miles de refugiados” se les “marchitó la esperanza”. “Nadie sabía qué iba a ocurrir con esas solicitudes de visa. Y hasta hoy ninguna entidad o funcionario ofrece un camino certero para seguir con los trámites de residencia”, afirman.
Los refugiados cubanos solicitan que se reevalúen las condiciones de sus trámites y argumentan que no piden “hacer viajes de turismo”, sino que abogan por un estatus migratorio que les permita “hacer el trámite de reunificación a niñas y niños alejados de sus padres y familias sufriendo la distancia”.
Yuliasdi Herrera es la portavoz del grupo que presentó la carta. Según contó a la diaria, llegó a Uruguay hace más de un año y desde hace algunos meses trabaja como empleada doméstica en una casa, mientras que su esposo es guardia de seguridad. Relató que se fue de Cuba para mejorar su situación económica, “no por un problema político”, y debió dejar a sus dos hijos, de seis y 14 años, con su madre. “Son niños que tienen que enfrentar esta situación ellos solos, sin más. Mi niño mayor es epiléptico desde que nació, pero producto de esta situación empezó a presentar un desorden en su personalidad. Y después empezó la niña más pequeña, que presentó un problema de estrés depresivo y tuvo un problema con la alimentación, y estuvo un tiempo ingresada porque dejó de comer”, relató.
Herrera busca legalizar su situación para poder hacer la reunificación familiar con sus hijos. “Nosotros tenemos pensado quedarnos acá, ya rentamos una casa y tenemos un contrato por dos años. La casa que tenemos la rentamos con dos cuartos para que cuando los niños vinieran tuvieran su cuarto independiente”, añadió.
Fuentes de la cancillería consultadas por la diaria señalaron que desde la reapertura parcial de fronteras comenzaron a normalizarse los trámites. Según indicaron, en lo que va de febrero ya se aprobaron 33 solicitudes de reunificación familiar. Las residencias también se están comenzando a tramitar, a través de la Dirección Nacional de Migración, y todos los viernes por la web se libra una cantidad de cupos para la semana siguiente. El problema, explicaron, es que por lo general hay más solicitudes que cupos.