“Volver a abril de 2020” fue la frase cabecera de los senadores frenteamplistas durante la tercera reunión de la Comisión Especial de Seguimiento de la Emergencia Sanitaria de la Cámara de Senadores. Durante la sesión, la oposición propuso adoptar más medidas que restrinjan la movilidad durante un mes, tomando como base las recomendaciones del 7 de febrero elaboradas por el Grupo Asesor Científico Honorario y las realizadas por el Sindicato Médico del Uruguay y la Federación Médica del Interior, en la anterior reunión de la Comisión.
Se analizó “la importancia de poder apuntar al descenso de la movilidad para detener el índice de contagio y dejar de lamentar las muertes diarias que se están registrando de forma estrepitosa”, explicaron los legisladores frenteamplistas en la propuesta escrita. Entienden que las restricciones económicas “son fundamentales al momento de analizar la respuesta de la ciudadanía ante la convocatoria de evitar interactuar con personas fuera de su ‘burbuja familiar’”. Por ese motivo, la bancada frenteamplista planteó que, para aplicar este tipo de propuestas, se debe garantizar que “los hogares cuenten con ingresos económicos que aseguren el sustento familiar”.
Dentro del paquete de recomendaciones, se incluyó nuevamente la creación de una renta básica de emergencia para las personas que tengan la Tarjeta Uruguay Social, que cobren asignaciones familiares o reciban canasta. El subsidio se aplicaría de mayo a agosto y sería adicional para que su ingreso mensual alcance un salario mínimo líquido. También se propone completar la diferencia a quienes cobran seguro de paro por un valor menor al salario mínimo nacional.
Además, el FA reiteró otras medidas que ya han planteado al gobierno, como “la suspensión de los desalojos y lanzamientos de inquilinos por 120 días”, el “diferimiento de intereses de cuotas hipotecarias”, el “subsidio al alquiler”, la suspensión de los cortes de servicios de luz, agua e internet, entre otros.
El senador socialista Daniel Olesker declaró que durante la situación en marzo de 2020 no se veía “un auge del seguro de paro”, pero actualmente, “si una empresa envía a seguro de paro a trabajadores este año, el año que viene no cumple los 12 meses”. Por lo tanto, sostuvo que hay que “eliminar la restricción” para que el trabajador pueda ingresar al seguro de paro “independientemente de cuánto tiempo estuvo en seguro de paro transitorio”.
Para los trabajadores con multiempleo que hayan sido despedidos de una de sus fuentes de ingreso laborales, se propone que “cobren lo correspondiente al empleo perdido”. También se manifiesta la intención de brindar a los trabajadores con comorbilidades, que el virus podría impactar gravemente en su salud, un seguro de enfermedad, una licencia especial con goce de sueldo por seis semanas.
La oposición busca poner sobre la mesa la creación de un plan de atención con patologías no covid, “en especial las enfermedades crónicas no transmisibles y la salud mental”, para poder “evitar y amortiguar las secuelas pospandemia”.
Visiones encontradas
“Yo te diría que no soy muy optimista de que podamos discutir o encontrar un camino sobre la renta básica o cerrar la movilidad”, declaró el senador nacionalista Jorge Gandini.
Gandini aseguró que “nadie quedó sin vacunas”. “En agosto, dos millones de personas seguramente tendrán sus dos vacunas y los catorce días”, manifestó y agregó que “hay un capital importante para agregar circulación, acceso, movimiento”. Hizo referencia a la posibilidad de crear un “pase verde” que permitiría a las personas vacunadas “acceder a actividades sociales, culturales, turísticas y recreativas”. “La tendencia actual es que los países o regiones más desarrolladas comienzan a autorizar el ingreso a sus territorios exclusivamente con las vacunas que han sido autorizadas por ellos, negando dicha autorización a otras vacunas igualmente avaladas por la OMS [Organización Mundial de la Salud]”, indicó. El senador dijo que “hay que empezar a hablar” de incorporar como obligatoria la vacuna contra la covid-19 para el personal de la salud.