El Senado definió este martes la fecha para la interpelación de los ministros de Salud Pública, y Economía y Finanzas, Daniel Salinas y Azucena Arbeleche: será el martes 6 de julio desde las 10.00. La interpelación, promovida por la oposición, se aprobó el 8 de junio por 13 votos en 29 y con el rechazo del oficialismo.
El miembro interpelante será el senador socialista Daniel Olesker, quien en diálogo con la diaria identificó motivaciones “de forma” y “de fondo” que llevaron al Frente Amplio a impulsar la iniciativa. La motivación de forma, explicó, es el “rechazo prácticamente total” del gobierno a las propuestas planteadas por la oposición en el ámbito legislativo, concretamente en el seno de la comisión de seguimiento de la pandemia: “Todos los partidos coincidimos en que la etapa de la comisión estaba agotada, porque nadie propuso que siguiera, y que el gobierno había decidido no contemplar las propuestas del FA como estrategia para la pandemia”. Entonces, “el paso que quedaba desde el punto de vista legislativo era la interpelación”, señaló.
En cuanto al “fondo de la cuestión”, la necesidad de la interpelación tiene que ver con “tres momentos de la pandemia”: el ayer, el hoy y el mañana, indicó el legislador. En lo que respecta al ayer “hay una responsabilidad en la política pública sanitaria y económica en los resultados que hoy tenemos (pobreza, desempleo, contagios, fallecimientos, etcétera)”; en el hoy, “hay posibilidades todavía de hacer cosas para que no se sigan profundizando estos resultados”; y de cara al futuro “la pospandemia tiene un componente económico y de secuelas sanitarias sobre el cual no vemos absolutamente ninguna preocupación” por parte de las autoridades, consideró Olesker.
En síntesis, “es una interpelación para discutir la enorme contradicción entre la política pública y la evidencia científica, lo que todavía se puede hacer y el futuro de la pospandemia”, resumió el senador.
Como miembro interpelante, Olesker apunta a que se responda el “porqué de la contradicción entre la política pública y la evidencia científica”, el “porqué de no tomar medidas de protección económica y social que hubieran impedido el aumento de la pobreza y del empleo”, y “si se piensa hacer algo de acá para adelante”. “Vamos a trabajar mucho con el tema de las secuelas propias de la covid-19 (respiratorias y cardiovasculares) y las que derivan de las dificultades de atender patologías no covid (salud mental, cirugías postergadas, etcétera), pero también sobre el plan económico” para la salida de la crisis, indicó.