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Foto: Rodrigo Viera Amaral

Senadores del FA presentaron este miércoles proyecto de ley para reducir la jornada laboral sin afectar el salario

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En el caso de aprobarse, la aplicación será de forma gradual y no será de aplicación en aquellos sectores que tengan regímenes “más beneficiosos”

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La bancada de senadores del Frente Amplio (FA) presentó este miércoles en el Parlamento el proyecto de reducción de la jornada laboral semanal. Así lo anunció el senador Daniel Caggiani a través de twitter, donde también compartió el documento de la propuesta. “¡Vamos por más derechos para todas y todos nuestros trabajadores!”, agregó el legislador. La iniciativa surgió del Espacio 609, donde está el Movimiento de Participación Popular (MPP), sector que integra Caggiani.

El objetivo es que la jornada laboral pase de 48 a 40 horas semanales para todos los trabajadores con indiferencia del sector en que se desempeñen, a partir del cuarto año de vigencia de la ley. Previamente, en el primer año, se reducirá dos horas, y así sucesivamente hasta el cuarto año.

En la exposición de motivos se sostiene que Uruguay se encuentra entre “aquellos países latinoamericanos, que poseen un límite máximo de jornada muy extenso de 48 horas semanales” y que, de acuerdo a un estudio de la Organización Internacional del Trabajo, es el tercer país en la región donde se trabajan más horas por semana (42,1) después de El Salvador (43,4) y México (42,1).

Además, se señala que el mundo del trabajo enfrenta “uno de sus mayores desafíos como lo es la resolución del conflicto con las nuevas tecnologías” y el avance de la inteligencia artificial, que tienen diferentes consecuencias en el ámbito laboral: como “desempleo, la función y financiamientos de los sistemas de seguridad social, la economía, y la sociología, entre otros”

Asimismo, el FA plantea que algunos países han comenzado a disminuir la jornada laboral como forma de enfrentar esta situación, “sin que la disminución suponga una rebaja en el salario de los trabajadores ni afecte los ritmos de producción” y argumentan que esta medida posibilita incrementar los márgenes de ganancia “sensiblemente”. “Sin duda alguna el presente proyecto tiende a mejorar la distribución del trabajo existente, a optimizar el bienestar de los trabajadores y las trabajadoras y adecuarse a una nueva realidad laboral”, agrega el documento.

De esta forma, se fija el límite máximo de la jornada diaria en ocho horas y 40 horas a la semana. En el articulado propuesto, aclaran, que este proyecto no será de aplicación en aquellos sectores que tengan regímenes “más beneficiosos a lo establecido en la presente, ya sea producto de leyes especiales, convenios colectivos, laudos de Consejos de Salarios”, entre otros motivos. Además, el artículo cuarto establece que en ninguno de los casos la reducción horaria podrá habilitar la disminución proporcional del salario vigente y, además, toda aquella jornada laboral que exceda el horario de trabajo deberá ser remunerada como horas extras.

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