Un mono tití está suelto desde hace algunos días en Montevideo. El animal fue visto en diferentes barrios de la capital y este domingo vecinas y vecinos del barrio Mercado Modelo notificaron a las autoridades sobre su presencia en la zona. Desde esta mañana, técnicos del Ministerio de Ambiente (MA) llevan adelante un plan para capturarlo, que consiste en colocar jaulas con alimento en un punto estratégico, para que el animal entre y cuando eso suceda caiga la puerta.
Las características del animal dificultan que pueda ser capturado con otros métodos. No pueden utilizarse dardos tranquilizadores por su tamaño, ya que el mono tití tiene una altura de 20 centímetros. También se descartó que pueda ser atrapado por Bomberos por su agilidad y es muy difícil capturarlo con un calderín, según explicó la encargada del área de Fauna del Ministerio de Ambiente (MA), Carmen Leizagoyen, a la diaria.
Asimismo, sostuvo que si bien el animal puede atacar cuando se siente amenazado, la mordedura de un mono tití es muy pequeña y “apenas da para agarrarte un dedo”. “No tenés un riesgo; además el animal no va a saltar a atacarte. Ataca si está acorralado, pero el animal tiende a huir”, dijo.
“No hay mucha cosa para hacer; lo máximo que puede hacerse es poner una trampa, porque es un animal que vive en la selva, se mueve de árbol en árbol. Que se mueva 500 metros para el animal no es nada, pero para nosotros significa cinco cuadras y es inviable andar con una jaula detrás de él”, sostuvo Leizagoyen. Así que hay que tener paciencia.
Para que el plan del MA funcione, las autoridades pidieron a los vecinos de la zona que no lo alimenten, como lo estuvieron haciendo para mantenerlo en la zona, para que el animal se acerque a las jaulas en busca de alimento. Una vez que el mono sea capturado, será trasladado a una reserva en Durazno.
Una de las jaulas fue colocada en el techo de uno de los vecinos, que contó a Subrayado que la presencia del mono generó “ansiedad” en los alrededores, los perros ladran constantemente, los vecinos curiosean y hasta le han puesto un nombre: “Chirivín”, porque “nos cayó simpático”. Incluso, algunos colaboran con los técnicos del ministerio.
El vecino dijo que una de las preocupaciones que tienen es cómo pasa el mono durante la noche por las bajas temperaturas. “Da hasta lástima que el bichito ande en la vuelta acá”, expresó. También preocupa que pueda transmitir alguna enfermedad por el contacto con sus heces u orina, porque se desconoce en qué estado está el animal.
Una situación habitual
Leizagoyen sostuvo que “evidentemente” este animal ingresó al país por contrabando y se le escapó a un particular. En ese sentido, sostuvo que como se trata de una situación ilegal, “nadie va a venir a reclamarlo” por las multas que se aplicarían. Lejos de ser una situación puntual, el contrabando de animales en Montevideo es algo habitual. “Uruguay es una vía de tránsito, de tráfico, y es usuario de ese tráfico porque la legislación en el país no está en corcondancia con la del resto del Mercosur, donde hay penas de cárcel”, explicó.
Las sanciones que se aplican frente a este delito “varían” según la “especie, el momento, si hay reincidencia o no”, entre otros elementos, dijo la encargada del área de Fauna, y sostuvo que el MA ha puesto multas desde “10 UR (unidades reajustables) a miles de UR”. De hecho, uno de los aspectos que preocupan a Leizagoyen es que el animal pueda ser robado.