En la previa de la sesión del martes de la Comisión de Salud Pública y Asistencia Social de la cámara baja, en la que se iba a tratar el proyecto de eutanasia, se vivieron momentos de tensión que tuvieron como protagonista al diputado blanco Rodrigo Goñi, acérrimo enemigo de la iniciativa, que, si bien no integra el cuerpo, se hizo presente —cualquier legislador puede asistir a la comisión que le plazca—. Fuentes parlamentarias dijeron a la diaria que Goñi mantuvo un intercambio con la presidenta de la comisión, la diputada colorada Nibia Reisch, y el nacionalista “se ofendió”, habló de “falta de respeto” y se fue cuando empezaba la sesión, a raíz de supuestos cambios en el proyecto que iban a tratar.
Luego de esas idas y vueltas, la comisión sesionó normalmente por cerca de dos horas. Recibió a integrantes del grupo de apoyo para una Muerte Asistida Digna en Uruguay y a las autoridades del Colegio Médico del Uruguay.
El diputado del Frente Amplio Federico Preve, que integra la comisión, le bajó el perfil al altercado y dijo a la diaria que el proyecto presentado en esta legislatura —y firmado por varios legisladores de distintos partidos— fue el que había salido de la comisión hacia el plenario en 2022, cuando tuvo tres modificaciones, pero que por “un error administrativo” el que iban a tratar el martes no era ese. Agregó que plantearon este error antes de iniciar la sesión y votaron esas modificaciones. Por lo tanto, subrayó que ahora el proyecto que se está tratando en la comisión “es el mismo que tuvo media sanción en 2022” en la Cámara de Diputados.
Preve aclaró que las tres modificaciones son las del artículo 2, que establece que la eutanasia es aplicable para quienes sufren de una “enfermedad terminal y deterioro progresivo de la calidad de vida”; luego, la del artículo 6, que “sólo las instituciones prestadoras del sistema de salud pueden aplicar la eutanasia, y no instituciones privadas”; y la del artículo 12, relativo a la implementación de una “comisión de revisión”. “Esas tres cosas las incluimos en el tratamiento actual, ya las votamos en la comisión y se subsanó ese error administrativo. No pasó absolutamente nada”, insistió.
Sobre lo que pasó con Goñi, Preve dijo que hubo una situación “un poco violenta”, por parte de un diputado “que no participa de la Comisión de Salud y se retiró de sala a los gritos”. Señaló que en la sesión intercambiaron con el diputado blanco José Luis Satdjian, que sí integra la comisión, y lo hicieron “en otros términos, mucho más razonables”.
En cuanto a cómo seguirá el trabajo de la comisión, Preve dijo que recibirán a seis delegaciones más (dos más de las que estaban previstas, ocho en total) y la idea es empezar a discutir los artículos en junio para poder votarlo ese mes. Por lo tanto, señaló como “probable” que en julio se trate en el plenario de Diputados, ya que la idea del oficialismo es que el proyecto de eutanasia se vote antes de que llegue el Presupuesto. Por último, subrayó que los votos para aprobarlo “están”.
La palabra de Goñi: “Lo hicieron de mala fe”
“Una vergüenza”, dijo a la diaria el diputado Goñi, visiblemente enojado, varias horas después de terminada la comisión, sobre la situación que vivió. Sostuvo que se presentó el proyecto “diciendo que era el mismo que el anterior”, pero él “hace dos meses” que viene “denunciando que le habían hecho dos cambios gravísimos”, como “habilitar las clínicas privadas”. Sostuvo que esto era como “habilitar para Uruguay y el mundo”, por lo tanto, convertía a nuestro país “en turismo eutanásico” (en referencia al artículo 6), y aseguró que “le arrancaron un pedazo” al texto aprobado en Diputados en 2022. Además, dijo que fue “una aberración sacar la comisión de revisión” del proyecto.
Goñi sostuvo que si se trató de un error, “no pueden ser legisladores”, pero, a su juicio, ese cambio al proyecto votado en 2022 “lo hicieron de mala fe”, y puso en duda que hubieran hecho esos cambios en la comisión el martes si él no los hubiera denunciado. Agregó que “la violencia está en lo que ellos hicieron” y que si “no leyeron su proyecto, tienen que renunciar a la cámara”.
A todo esto, el diputado colorado Felipe Schipani, que no pertenece a la comisión pero participó en la sesión, resaltó a la diaria que “por supuesto” votarán la iniciativa, porque su sector es uno de los que la propuso. También señaló que la idea es que se apruebe en julio, antes de que ingrese el proyecto del Presupuesto Nacional del Poder Ejecutivo —en agosto—.
Schipani subrayó que los cuatro diputados de su sector (el sublema Unir para Crecer) y otros representantes colorados levantarán la mano para aprobarlo. Por último, el diputado destacó que es un tema “muy importante” y que el proyecto original fue presentado por el entonces representante colorado Ope Pasquet en marzo de 2020, por lo tanto, “ya hace más de cinco años que está discutiéndose en el Parlamento”.
“Hay mucha gente esperando a que se apruebe este proyecto, porque realmente es una situación compleja que viven muchas personas, de sufrimientos insoportables, y la eutanasia va a ser un derecho que van a tener, para aquellos que quieran recurrir a él, con todas las garantías que establece el proyecto”, finalizó.