Según el Instituto Cuesta Duarte (PIT-CNT), el proceso de recuperación del mercado de trabajo uruguayo iniciado tras el fin de la pandemia atraviesa actualmente una etapa de “enfriamiento” y “deterioro”. Un reciente informe del instituto advierte que durante el primer trimestre de 2023 la tasa de desempleo promedio se ubicó en 8,4%, superior al “7,4% observado en igual período de 2022”. Se trata de unas 154.000 personas sin trabajo, 20.000 más que el año pasado.
El “enfriamiento” y el “deterioro” en el nivel de ocupación provienen desde fines de 2021, “un fenómeno asociado tanto al estancamiento en el nivel de empleo como a la recuperación de la cantidad de personas disponibles para trabajar”.
Hugo Bai, economista del Cuesta Duarte, dijo a la diaria que si bien las tasas generales del mercado laboral “todavía muestran niveles mejores que las previas a la pandemia”, en la comparación de los primeros meses de 2022 y los de 2023 “claramente hay un deterioro en el desempleo”, explicado por un estancamiento en el empleo y por “un aumento de la cantidad de personas que salen a buscar trabajo después de la pandemia”.
Por su parte, el director nacional de Empleo, Daniel Pérez, señaló a la diaria que “es normal que en marzo haya un aumento del desempleo, si uno mira para atrás, en 2018, en 2019, también en marzo hay una suba del desempleo”. Sin embargo, sostuvo que “cuando uno mira la gente empleada” los datos muestran que “hoy hay más puestos de empleo que en la prepandemia, incluso con 2018 hay más gente que está trabajando al día de hoy”.
En simultáneo al aumento del desempleo se constató –en promedio– una baja de los precios y una suba de los salarios. El Cuesta Duarte marca en marzo una variación interanual del Índice de Precios del Consumo (IPC) de 7,33%, “lo que supone el sexto mes consecutivo de disminución del ritmo inflacionario”. En tanto, el salario real medio mostró en marzo un incremento interanual de 3%; aunque todavía sigue 2% por debajo del nivel que tenía en 2019.
Perspectivas
Consultado por el pronóstico para el mercado de trabajo para el resto del año, Pérez manifestó que seguirá “manteniéndose estable en términos de empleo”, aunque puntualizó que hay “factores internos y externos” que influyen de manera directa. A modo de ejemplo, mencionó que “la situación del litoral está muy influida por Argentina; ahí la situación es mala y no va a mejorar inmediatamente”.
Según el informe del Cuesta Duarte, en el primer trimestre del año las tasas de desocupación más altas se registraron justamente en departamentos del litoral: Salto (14,2%), Río Negro (13,4%) y Soriano (12%); y también en el norte, Artigas (12,7%).
El Observatorio Económico de Salto de la Universidad Católica del Uruguay determinó que, en marzo, comprar una canasta representativa de bienes transables en Salto era 127% más caro que comprarla en Concordia, del lado argentino.
Para Bai, las cifras de desempleo del litoral “son bien elocuentes del fenómeno que está pasando ahí”. Un fenómeno, sostuvo, “muy complejo”, y que a diferencia de períodos anteriores tiene la particularidad de que “está presente desde hace un tiempo importante y no hay perspectivas de un cambio a mediano plazo”. “Si queremos mitigar ese problema va a ser necesario desplegar políticas bastante más importantes de las que se han venido desplegando”, consideró.
No obstante, al margen de la situación en el litoral, Pérez vislumbra un panorama positivo en materia de empleo para los próximos meses. “Lo que ha anunciado la propia ministra de Economía [Azucena Arbeleche], que es la que tiene más datos en relación a las inversiones, es que este año también va a haber un aumento del empleo”. Afirmó que el trabajo “se genera a partir de la inversión privada y la inversión pública”, que “ya se está haciendo”, sobre todo, en obras de construcción y reparación de rutas y puentes. Destacó la política “bastante expansiva” del Ministerio de Transporte y Obras Públicas, que “tiene previsto para este año seguir haciendo obras”.
En cambio, Bai ve “un panorama incierto” para el mercado de trabajo en el resto del año. “No parece haber riesgo de un retroceso importante, pero ese proceso [de recuperación después de la pandemia] parece haberse agotado, se estancó, y ahora está costando retomar”, comentó. A futuro incidirán “el contexto macroeconómico general, la cuestión cambiaria, la inflación y el crecimiento del PIB”, entre otras cosas. Respecto a la inversión pública, afirmó que existe “un cierto rezago” porque “en estos años el país viene invirtiendo menos que lo que lo hacía en el pasado”.
Jóvenes sin trabajo
El informe del Cuesta Duarte advierte sobre el desempleo juvenil como un “rasgo estructural” del mercado laboral uruguayo. Mientras que para las personas de entre 30 y 65 años la tasa de desocupación no supera el 6,6%, para las personas menores de 25 años se ubica en 23,5% en los primeros meses del año. “Las cifras observadas exigen el despliegue de políticas públicas más potentes para garantizar la reducción de estas brechas, que condicionan la inserción laboral futura de los sectores más vulnerables de la población”, sostiene el documento.