El encuentro, que fue una suerte de balance de los últimos cuatro años de este gobierno en materia económica, incluyó una serie de afirmaciones de la ministra de Economía y Finanzas, Azucena Arbeleche, que fueron analizadas por la diaria Verifica.
Una de las frases salientes de la presentación de la ministra refería a la situación fiscal: “El gobierno cumplió con las metas fiscales”. La titular del MEF presentó el dato de déficit fiscal de gobierno central y Banco de Previsión Social (GC-BPS) al cierre de 2023, que finalizó en 3,3%.
Arbeleche resaltó que el resultado estuvo apenas 0,1% por encima de lo previsto debido a un ajuste a la baja de la evolución final del producto interno bruto (PIB). Sin embargo, en el último período el MEF modificó las proyecciones del resultado fiscal para el año pasado. Comenzó 2023 con un 2,5% de déficit previsto en la Rendición de Cuentas de 2022, cifra que fue corregida al 2,7% en la Rendición de Cuentas de junio de 2023.
“Hubo varios cambios en la meta específica, además de cambios que fueron sucesivos. Primero, cuando se estableció la meta en el presupuesto quinquenal; después, en las diversas rendiciones se fue ajustando y, en particular, en el último año se volvió a ajustar la meta fiscal”, explicó a la diaria Verifica la economista Gabriela Mordecki, profesora titular del Instituto de Economía de la Universidad de la República (Udelar).
Asimismo, agregó que el ajuste estructural también sufrió un cambio que está relacionado con cómo se compara el potencial de crecimiento: “Si el potencial es más alto y la economía está en un período de menor crecimiento, la posibilidad de no cumplir aumenta”.
Para la economista, “se podría afirmar que en realidad el gobierno cumplió con las metas fiscales porque a mediados del año pasado se volvió a corregir la meta”.
¿Bajaron los impuestos en 2023?
Por otro lado, la titular de la cartera económica defendió una de las banderas del gobierno: la baja de impuestos. “En 2023 se bajaron los impuestos”, señaló.
En su discurso Arbeleche destacó que el año pasado entró en vigencia la baja de impuestos anunciada por el presidente Luis Lacalle Pou en su discurso ante la Asamblea General en marzo de 2023. Allí se elevó la deducción del Impuesto a la Renta de las Personas Físicas (IRPF) de 10% a 14% para los trabajadores con menores ingresos, y se aumentó el mínimo no imponible del Impuesto de Asistencia a la Seguridad Social (IASS) de ocho a nueve unidades de Base de Prestaciones y Contribuciones (BPC) mensuales, con la que se definen los mínimos imponibles de IRPF e IASS.
Sin embargo, Mordecki señaló que “habría que considerar el impacto del ajuste del mínimo no imponible del año anterior [enero de 2021] por un criterio que era más recaudatorio”. Ante esto, aclara que “ajustar el criterio del mínimo no imponible no es estrictamente una suba o una baja de impuestos, pero, en efecto, termina implicando una mayor recaudación de lo que hubiera sido con un ajuste diferente”. Legalmente, la BPC puede ajustarse por la inflación estimada en el Índice de Precios al Consumidor (IPC) o por el Índice de Salario Medio (IMS), y esa decisión tiene efectos diferentes en el impacto de los impuestos sobre los salarios.
Ese mínimo no imponible tuvo un aumento indirecto en enero de 2021, luego de que el gobierno modificara el criterio de fijación de valor de dicha prestación. En un contexto de caída del salario real, el uso del IMS en lugar del IPC implicó que el monto del mínimo no imponible tuviera una caída de -1,6% y que derivara en una mayor recaudación tributaria a través del IRPF y el IASS.
En contrapartida, en marzo de 2020 Lacalle Pou anunció la derogación del descuento de dos puntos de IVA para compras con tarjetas de débito, lo que significó un aumento indirecto de este impuesto al consumo.
Ante la afirmación de la ministra, Mordecki señala que ese aumento puede contestarse con que “no hubo esa baja para todo el período desde 2020”, así como “también se contesta con este otro aumento o fijación de un “precio para la salida de Uruguay vía fluvial”, que tendrá vigencia a partir de este año. “Habría que mirar todo el gobierno” para sacar conclusiones sobre subas o bajas impositivas, afirmó.
El PIB creció 3,6% respecto de antes de la pandemia
Por último, la funcionaria destacó el crecimiento económico y señaló que el PIB de Uruguay está 3,6% por encima de los niveles previos a la pandemia. Los datos del Banco Central (BCU) ratifican lo señalado por la funcionaria.
Respecto de este aumento del PIB, Mordecki señala que coincide con los cálculos elaborados también por el Instituto de Economía de la Udelar: “Es exacto lo que da si uno mira la proyección del PIB del último trimestre, de 0,5%”, que es la proyección que hace el MEF y que “más o menos sería 3,6% (de diferencia) si uno compara con 2019.
En 2023 la actividad económica moderó notoriamente su ascenso de los años previos (tras la caída de 6,3% en 2020, había crecido 5,3% y 4,9% en 2021 y 2022, respectivamente). Para 2024, el BCU proyecta una aceleración en el entorno de 3,5%.