El Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres) del Ministerio de Desarrollo Social espera una respuesta del intendente de Maldonado, Enrique Antía, para mantener una reunión a raíz del lanzamiento del programa de “reeducación” para “mujeres victimarias” que brindará la Dirección de Género de la comuna, contó a la diaria la directora del instituto, Mónica Bottero.

Durante el lanzamiento del programa, Jeanette Perdomo, operadora social en prevención de la violencia que estaba al frente de los talleres, dijo que “un 60% de mujeres en nuestro país están siendo marcadas como violentas y un 30% de hombres, entre 25 y 45 años, se han suicidado a raíz de no animarse a denunciar la violencia”. La declaración fue publicada en la página web de la intendencia el viernes 27 de enero y eliminada el martes siguiente, después de que la abogada Marina Morelli la cuestionó en Twitter. El jueves la comuna pidió la renuncia de Perdomo. No obstante, informó que la administración seguirá adelante con el programa.

“Se dijeron estadísticas y se hicieron algunas consideraciones que nos parece que no coinciden con la realidad, por lo menos con la realidad oficial de los datos y las estadísticas que nosotros tenemos. Además, creo que [el programa] contraviene los principios rectores de determinados convenios e incluso de leyes nacionales”, manifestó Bottero.

Las cifras del Instituto Nacional de Estadística indican que de cada 100 personas que sufren violencia, 98 son mujeres, indicó la directora de Inmujeres. “No son hombres, porque acá había una inquietud sobre hombres agredidos. Evidentemente, las cifras en relación a los niños indican que hay una prevalencia de violencia hacia niños, incluso de abuso sexual dentro del hogar, pero el INAU tiene mecanismos para intervenir en eso, que son mecanismos validados a nivel internacional protocolizados y altamente profesionalizados”.

Además, Bottero cuestionó la terminología elegida para el nombre de los talleres: “No estamos de acuerdo con el término ‘mujeres victimarias’, porque parece que se está equiparando con los varones victimarios, lo que se hace es un cambio en el género del título”. Según dijo, no es un término “adecuado”, ya que se utiliza para referirse a un varón cuando es el responsable de un homicidio, de lo contrario se utiliza el adjetivo “agresor”.

Tampoco está de acuerdo con el concepto de “reeducación”. “No nos parece que el Estado tenga que reeducar, en todo caso contribuir a fortalecer otras formas de relacionamiento familiares y que estén acordes con los valores de cada familia”, señaló.

Para la titular de Inmujeres, “es una buena señal” que la intendencia haya prescindido de los servicios de Perdomo, no obstante, manifestó su preocupación por “cómo se van a encarar estos talleres”. “Nos gustaría primero saber cuál es el fundamento técnico y en qué datos se basan para instrumentar esta política y, por otro lado, ofrecer los recursos humanos de información y la experiencia del equipo técnico del Inmujeres para poder responder algunas inquietudes y poder apoyar en estos cursos”, planteó.

“Entendemos que la preocupación es la violencia intrafamiliar, que no solamente tiene que ver con violencia de género en el contexto de una pareja o expareja. Entonces, lo que estamos haciendo es ofrecer los servicios y los recursos del instituto y de otros organismos del Estado”, apuntó Bottero.

La jerarca valoró positivamente el vínculo con la Intendencia de Maldonado y recordó que la comuna “hizo gestiones decisivas” para la creación del primer juzgado especializado en violencia de género en San Carlos a principios de 2022, así como para la instalación de un centro 24 horas para mujeres en situación de violencia basada en género en esa ciudad en noviembre de 2021. “Nos gustaría continuar en una línea de colaboración”, señaló Bottero.

Una de las preguntas que Bottero tiene para hacerle a las autoridades de la intendencia es si existe algún tipo de coordinación entre el gobierno departamental y el Poder Judicial, dado que “es muy difícil que una persona que está ejerciendo violencia vaya por sí misma a decir ‘yo estoy ejerciendo violencia, vengo aquí a que me reeduquen’”. “Hay abordajes por parte de personal especializado en Fiscalía. Para esto se requiere hacer algún protocolo, oficializarlo y validarlo con especialistas”, añadió.

Bottero consideró que “hay una tendencia a equiparar” la violencia que reciben mujeres y varones y “ahí no se entiende un principio básico y es que la violencia de género, que sufren mayoritariamente las mujeres, se debe a una relación de poder desigual histórica y esto no es un tema de derecha ni izquierda tampoco, como se quiere plantear, está reconocido hace décadas y se ha acordado a nivel internacional”.

“La cultura machista o patriarcal es una cultura que excluye y que establece la supremacía de un género sobre otro. El feminismo lo que reclama es simplemente la igualdad, la democracia dentro de la casa, en los vínculos, la equidad los vínculos, en el trabajo, en todo tipo de vínculos sociales, entonces no es equiparable una cosa a otra”, expresó Bottero.

En diálogo con la diaria, la técnica de la Dirección de Género de la comuna había dicho que “según las cifras que llegan de judiciales, donde más se notó [es] en la violencia lésbica. Es tremendo, siempre hay una con más fuerza que la otra”. Y preguntó: “¿Hay que ayudarlas o dejarlas que se maten?”. Consultada sobre esto, Bottero aseguró que se trata de un “disparate soberano, no existe ninguna estadística que pueda avalar ese disparate”. “Es una incitación al odio, es una expresión de discriminación y es una agresión a los Derechos Humanos de las personas lesbianas y de todas las personas”, manifestó.

El programa reproduce “estereotipos de género y prácticas discriminatorias hacia las mujeres”, según la OEA

Este viernes, el mecanismo de seguimiento de la Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra las Mujeres de la Organización de Estados Americanos (OEA) manifestó su preocupación por la iniciativa que lleva adelante la intendencia en un comunicado. “El Comité de Expertas expresa su preocupación frente a la iniciativa de la Intendencia de Maldonado de organizar un programa para reeducar a ‘mujeres victimarias, según lo reportado por medios de comunicación y organizaciones de la sociedad civil”, publicó el organismo internacional en Twitter.

La OEA consideró que el programa se sostiene en “estadísticas erróneas e inexistentes” y su implementación “tiene como resultado reproducir estereotipos de género y prácticas discriminatorias hacia las mujeres”. Asimismo, el organismo recordó que el artículo 6 de la Convención de Belém do Pará dispone que “toda mujer tiene derecho a ser valorada y educada libre de patrones estereotipados de comportamiento”.

“Es obligación de los Estados Parte: fomentar la educación y capacitación del personal de justicia, policial y demás funcionarios a cuyo cargo esté la aplicación de las políticas de prevención, sanción y eliminación de la violencia contra la mujer”, sostiene el comunicado