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Taller literario, ayer en Urbano Espacio Cultural del Ministerio de Desarrollo Social (Mides).

Foto: Nicolás Celaya

En colectivo

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Frutos del taller literario “Más que palabras”

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El espejo de los náufragos es el título del libro que compila trabajos del taller que tuvo lugar desde finales de 2010 y durante 2011 en Urbano Espacio Cultural; centro dirigido a personas en situación de calle donde se busca promover el desarrollo integral de los concurrentes por medio de su participación en actividades de formación y producción cultural.

Entre firmas de autógrafos de los autores y gran expectativa, se realizó ayer la presentación del libro compuesto por construcciones individuales y colectivas, pasajes casi espontáneos y poemas elaborados. Son textos que reflejan estados de ánimo y sentimientos, y que presentan aspectos de la vida cotidiana de forma distinta. Tal como Heber escribió con puño y letra en agosto: “¿Para qué sirve un educador? Para rozar la piedra de carbón rescatando el diamante que contiene” o “¿Para qué sirve el silencio? Prueba el cerebro; ordena el borrador de nuestro existir”.

Walter Ferreira, responsable del taller, explica en la introducción del libro que en la compilación elaborada “la literatura no está hecha de palabras previamente interpretadas, y se aleja de una concepción del arte ‘sólo para algunos elegidos’”. “Está hecha de personas enteras, de inteligencias, de rebeldía y pensamiento. Y de poesía, claro, de incontable poesía”, agrega.

Alfredo Correa, coordinador del espacio que es financiado por los ministerios de Educación y Cultura y Desarrollo Social, y gestionado por la organización no gubernamental Luna Nueva, se refirió a lo que significó producir y publicar el texto para los usuarios del centro. “Permite devolverles una imagen de personas que pueden decir, y dejar de ser invisibles”, resumió en conversación con la diaria. Detalló que de los 16 autores no todos se encuentran en situación de calle, también participaron en el taller literario vecinos y amigos de la casa, lo que “demuestra que personas que están en distintas situaciones encuentran un lenguaje común”.

Mensualmente circulan unas 200 personas por el centro y son poco más de 40 los que concurren en forma regular; la mayoría son hombres por lo que este año planean abordar con más intensidad la temática de género.

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