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Alumnos de la escuela 163 de Montevideo, durante un taller de hip hop. Foto: Federico Gutiérrez (archivo, setiembre de 2017)

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“¿Cuál es el diferencial que están logrando las escuelas de tiempo completo en la experiencia educativa de los niños?” Esa fue la pregunta de la que partió un estudio conjunto del Departamento de Investigación y Estadística Educativa (DIEE) de la Dirección Sectorial de Planificación Educativa (DSPE) del Codicen y el Proyecto de Apoyo a la Escuela Pública Uruguaya. El estudio comparó los desempeños de estudiantes de tercero y sexto año de escuelas que están bajo el programa de tiempo completo con niños que asisten a escuelas sin esa modalidad. En concreto, el equipo de investigación se fijó en el impacto de la modalidad de tiempo completo en los aprendizajes en matemática, lectura y escritura, y en las trayectorias de los niños entre el tercer año de escuela y el tercero de la educación media.

El estudio muestra que sí hay un diferencial en los aprendizajes en matemática y escritura para quienes concurren a Escuelas de Tiempo Completo (ETC), pero no ocurre lo mismo en lectura. En el caso de matemática, la evaluación, cuya medición se hizo en 2013 y 2016, muestra “un efecto estadísticamente significativo” del programa de ETC en la ganancia de aprendizajes en esta área. Si bien no hubo diferencias entre los logros de los niños cuando estaban en tercer año de escuela, sí hubo una variación cuando estaban cursando el sexto grado. Según se establece, ello puede ser consecuencia de dos hipótesis que no se pueden determinar con claridad: una posibilidad es que el desarrollo de aprendizajes en ambos formatos escolares sea similar hasta tercer año y después de ese momento sí mejoren entre los niños que concurren a las ETC; o puede ocurrir que los niños que llegan a las ETC lo hagan con una peor base que quienes no cursan bajo esa modalidad.

En el caso de la escritura, el análisis muestra que, “en promedio, los alumnos de las ETC eran escritores más competentes ya en tercer grado y, especialmente, que lograron progresar más que sus pares entre tercero y sexto”.

El estudio también indaga acerca de las valoraciones en la relación entre escuela y familia, que en general fueron “positivas, tanto en el grupo ETC como en el de comparación”, con niños que cursan otros formatos escolares. De todas formas, se registran “valoraciones algo más favorables entre las familias de los alumnos de las ETC”. Por ejemplo, 80% de las familias de quienes concurren a una propuesta de tiempo completo afirma que no quiere que el niño concurra a otra escuela, mientras que 75,8% afirma lo mismo en el grupo de comparación.

Acerca del sentimiento de los niños en el centro educativo al que concurren, cerca de 90% manifestó sentirse contento, alrededor de 85% dijo sentirse entretenido, 80% respondió que se siente tranquilo, y 20% dijo sentirse nervioso. Si bien estos porcentajes son similares para todos los niños, los estudiantes de ETC dicen sentirse aburridos en menor medida que quienes no asisten a ese tipo de centros: 19% frente a 26%.

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