El Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) realizó este lunes un debate sobre la violencia sexual en las zonas de conflicto. Uruguay, que ocupa la presidencia del organismo durante mayo, fue el impulsor de la actividad. Desde el Ministerio de Relaciones Exteriores explicaron que con este tipo de iniciativas “el país demuestra que en política exterior es capaz de ser tan hipócrita como las grandes potencias occidentales. Fronteras adentro, se hace un esfuerzo mínimo para combatir la violencia de género, pero se compromete con la lucha contra la violencia sexual que ocurre afuera”.
Fuentes de representaciones diplomáticas de otros países que también integran el Consejo de Seguridad reconocieron que Uruguay “ha sorprendido gratamente” durante estos primeros días de su presidencia, y citaron como ejemplo el debate organizado el lunes. “Todo el mundo nos decía que los uruguayos eran lentos para todo. Cuando empezó a circular la versión de que estaban organizando algo contra la violencia sexual en zonas de conflicto, nos pareció que iban a esperar por lo menos un año, porque hace menos de dos semanas que retiraron a sus tropas de Haití. Supusimos que querían dar tiempo a que se olvidaran todos los abusos sexuales cometidos por los cascos azules en ese país, incluyendo a los uruguayos. Pero no fue así. Demostraron un pragmatismo y un manejo de los valores muy apropiados para estos tiempos”, reconoció un integrante de la delegación francesa ante la ONU.
Desde el gobierno uruguayo aseguraron el mes pasado que no se habían recibido nuevos ofrecimientos para participar en misiones de paz. De todas maneras, una fuente del Ministerio de Defensa Nacional aseguró que el retiro de las tropas de Haití se debió precisamente a que para presidir el Consejo de Seguridad se necesita “cierta autoridad moral”. “En junio, cuando ya no estemos en la presidencia, volvemos a mandar soldados a cualquier país al borde del abismo y repleto de personas en situación vulnerable”, afirmó.