Si tomamos en cuenta que v es la velocidad con la que los hombres nos movemos para conseguir espacios de poder, m representa el miedo del macho a perder el control –por la ausencia de algún tipo de afecto en la infancia–, y t es el tiempo que hace que las principales decisiones políticas son masculinas, tenemos que, por mucho que usted y sus congéneres lo deseen, señorita, no, no hay mujer en la fórmula.
Requisito: ser mujer, pero no mucho
Días pasados, la Comisión de Candidaturas de nuestro Partido, con una intuición formidable y muy acorde al mundo de hoy, decidió realizar un llamado a mujeres con idoneidad, para que nuestra fórmula presidencial esté integrada por alguna de ellas. Porque nos lo estaban reclamando, porque somos un partido de convicciones y, principalmente: porque consideramos fundamental que haya una mujer anotando lo que se decide. Siempre atento a las necesidades de la gente, nuestro estimadísimo candidato a presidente ha decidido, con toda la sensibilidad y agudeza que lo caracteriza (esperen que me aprieta la pompa..., ahí está), hallar a aquella que tendrá el gran honor de acompañarlo.
¿De qué manera se elegirá a la afortunada? Por medio del sistema más eficaz y ameno que se conoce para descubrir personas de éxito: ¡un casting de talentos!
REQUISITOS:
Ser mujer (natural, sin sorpresas)
Ser ambiciosa (pero hasta ahí no más).
Tener conocimientos (pero no andar mostrándolos, tampoco).
Y si es bonita y de pollera, no le vamos a decir que tiene más posibilidades (pero sí).
Realmente queremos confesarles, venturosas señoras y señoritas, que es para nosotros de muy grato placer el contar con una de ustedes en nuestro equipo, como homenaje a nuestra entrañable y amorosa madre. Por ser flor de la vida, tierra que nos da el alimento, luna que siempre nos sigue... (esperen que me controlo la insulina..., bien, no está mal), por todo eso, y por mayor información, dirigirse bien vestida a la sede central de nuestro partido.
Las esperamos a todas, chicas. Bs.