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Ciudad vieja de Colonia del Sacramento.

Foto: Daniel Rodríguez, adhocFOTOS

Homenajearon al arquitecto Miguel Ángel Odriozola, referente en la conservación y restauración del patrimonio histórico de Colonia

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El tributo lo realizó el diputado Nicolás Viera en el marco del centenario del nacimiento del profesional coloniense y los 50 años de fundación del Frente Amplio.

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En la sesión de la Cámara de Diputados del martes 9 el diputado del Frente Amplio (FA) por Colonia, Nicolás Viera, rindió un homenaje al arquitecto coloniense Miguel Ángel Odriozola Odriozola, al cumplirse cien años de su nacimiento. El tributo también hay que enmarcarlo en el marco del cincuentenario de la fundación del FA, fuerza política que integró el profesional, comentó el legislador coloniense.

Odriozola fue un destacado arquitecto y dirigente del FA que nació en Colonia del Sacramento el 29 de enero de 1921. En 1937 se trasladó a Montevideo para realizar preparatorios en el Instituto Álfredo Vázquez Acevedo. Dos años después comenzó los estudios en la Facultad de Arquitectura, donde egresó en 1946. Odriozola se casó con Nelly Guillot; la pareja tuvo dos hijos: Miguel Ángel y Martín.

La visibilidad de Odriozola como actor político se acrecentó en 1971, en las primeras elecciones en las cuales participó el FA, recordó el diputado coloniense. “Si fuéramos a considerar la irrupción del arquitecto Miguel Ángel Odriozola en el mapa político” del departamento de Colonia “con ojos del siglo XXI, bien podríamos decir que fue un outsider”, explicó Viera. Destacó que Odriozola fue el primer presidente departamental del FA de Colonia y “el candidato único de toda la izquierda” para las elecciones departamentales celebradas en aquel año.

Según Viera, Odriozola “no era político, y mucho menos caudillo” sino “un excelente vecino, de ética intachable, destacado docente y profesional inteligente, capaz y prestigioso”. No obstante, “amigos de Colonia, colegas arquitectos, su familia y la gigantesca imagen del general Líber Seregni formaron un círculo perfecto para incentivar a Miguel Ángel en su postulación política”, estableció.

Viera comentó que el ingreso de Odriozola al FA le trajo aparejado varios contratiempos, ya que “ser del Frente Amplio a inicios de los años setenta significaba quemarse en una sociedad signada por la violencia, el conservadurismo estructural y el desprecio por el que pensaba distinto”.

En ese sentido, Viera dijo que Odriozola tuvo que hacer frente a la pérdida de clientes, que formaban parte de la estructura jerárquica de la exSudamtex, quienes “se reunieron con él para transmitirle que si los rumores se hacían realidad y él aceptaba ser candidato a intendente de Colonia por el Frente Amplio, ellos iban a prescindir de sus servicios profesionales”.

Frente a ellos, “Odriozola, fiel a su estilo y compromiso ético, que lo signó a lo largo de su trayectoria, no dudó ni un segundo, la respuesta fue inmediata: les agradeció por el trabajo que le habían dado durante un buen tiempo y les transmitió que esa actitud reafirmaba en él sus ganas y compromiso con la candidatura”, relató el diputado oriundo de Rosario.

Nicolás Viera. (archivo, junio de 2021)

Foto: .

Viera consideró que Odriozola ocupó “un sitial privilegiado entre los grandes de la arquitectura uruguaya”. Y recordó que “desde muy temprano tuvo especial interés” en la investigación sobre conservación y restauración del patrimonio histórico arquitectónico, lo cual lo impulsó a realizar estudios de postgrados en el exterior. Además, Odriozola fue docente en la Facultad de Arquitectura de la Udelar y en cursos de preparatorios del liceo coloniense.

En el ejercicio de su profesión Odriozola mantuvo vínculos estrechos con referentes de la arquitectura y de la ingeniería, como Julio Vilamajó y Eladio Dieste. Por ejemplo, junto a Vilamajó el arquitecto coloniense trabajó en proyectos de gran envergadura, como: “la Facultad de Ingeniería, en 1936; Sala de Máquinas de Rincón del Bonete, en 1939; Hotel Mirador de Colonia del Sacramento, en 1941, y Villa Serrana, en 1946”, recordó Viera.

En otro capítulo de su ponencia, Viera destacó la extensa actividad desarrollada por Odriozola en Colonia del Sacramento en temas relacionados con el rescate, restauración y conservación patrimonial en el actual actualmente conocido como barrio Histórico de Colonia del Sacramento, así como en la construcción de edificios que son emblemáticos en esa localidad. Entre 1986 y 1990, fue presidente del Consejo Ejecutivo Honorario de las obras de preservación y reconstrucción de la antigua Colonia del Sacramento.

La labor desplegada por Odriozola fue determinante para que el casco histórico de Colonia del Sacramento ingresara en la lista de bienes considerados patrimonio histórico de la humanidad por parte de la Unesco en 1995. Por este aporte, Odriozola fue distinguido como ciudadano ilustre de esa ciudad por parte de la Intendencia de Colonia .

Según Viera, Odriozola contribuyó “a la generación de pensamiento, a la investigación y al proyecto sobre conservación y restauración del patrimonio histórico arquitectónico que se consolidó en Uruguay hacia fines del siglo pasado” y “su trabajo sintetiza compromiso con la realidad y empleo de técnicas artesanales, mediado siempre por su particular sensibilidad”.

Al arquitecto Odriozola “lo seguimos viendo en la Basílica, en la muralla, en el portón de campo, en cada adoquín de nuestro querido barrio histórico de Colonia del Sacramento” y en las obras “compartidas con Dieste, con Vilamajó”, así como “lo encontramos en esa herencia inmaterial y afectiva que representan su familia y sus amigos”, dijo Viera.

El diputado concluyó que el arquitecto coloniense fue “un gran profesional que no reparó en miramientos ideológicos ni partidarios para dar lo mejor de sí, con el único cometido de aportar a su mundo inmediato y más allá”, “un ciudadano comprometido con su tiempo, que levantó las banderas por un mundo más justo, marcado por una clara sensibilidad social, que acompañó desde su credo y su accionar” que “se volvió ejemplo y referencia para muchos militantes de la vida que hoy lo vemos como una figura descollante por su inmensa humanidad”.

El arquitecto Miguel Ángel Odriozola falleció el 30 de noviembre de 2003.

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