En la sesión de la Cámara de Representantes del martes 9, el diputado coloniense Mario Colman (Partido Nacional) realizó un homenaje al extinto docente, parlamentario y exintendente de Colonia, Carminillo Mederos, al cumplirse el centenario de su nacimiento.
Colman destacó las múltiples facetas de Mederos: “bastaría para conocerlo si escucharan el eco de su profunda voz en la aulas de su querido Liceo de Juan Lacaze o de este parlamento como diputado y senador”, destacó Colman.
El legislador coloniense recordó que Mederos fue una figura política de “gran relevancia” para el departamento de Colonia y Uruguay. “Fue integrante, en dos períodos consecutivos, del Concejo Departamental, lo presidió en el período 1962-1967, y luego representante nacional y senador de la República.
Colman sostuvo que Mederos “era oriundo del departamento de Colonia no por nacimiento sino por elección” ya que nació en el departamento de Cerro Largo el 18 de agosto de 1921. “En 1944, un joven Carminillo Mederos se aquerenciaba en Puerto del Sauce en Juan Lacaze, localidad que eligió para formar su familia, para transitar los primeros pasos de su carrera política y para desempeñar su otra gran pasión que fue la docencia”, relató Colman, y comentó que los restos del caudillo nacionalista están en el cementerio de Juan Lacaze desde 1993.
“Debemos recordar no sólo al Carminillo político, que sin duda fue de gran relevancia”, sino también “al docente apasionado que jamás dejó de enseñar y al hombre de familia amoroso tal como nos contaron sus hijos y nietos”, propuso Colman.
El diputado coloniense recordó que se mudó desde Cerro Largo a Montevideo a comienzos de la década de 1940, y allí estudió profesorado de Historia Universal y Literatura. En 1944 Mederos se trasladó a Juan Lacaze, donde comenzó trabajando como fotógrafo y después se incorporó al plantel docente del entonces flamante liceo local. En 1945, Mederos incursionó en el periodismo, dirigiendo al periódico lacazino Combate, que tuvo una breve duración, “pero ya revelaba las inquietudes políticas del joven Carminillo”.
“La docencia, que fue su otra gran pasión y la que lo llevó a dictar clases en forma honoraria en los primeros cursos liceales que se dictaron en Juan Lacaze. Incluso después, siendo ya diputado, continuó dictando sus clases en el Liceo de Juan Lacaze viajando desde Montevideo para no abandonar a sus estudiantes”, destacó Colman.
También en Juan Lacaze, en 1949, Mederos se casó con Julia Galván Lostao, oriunda de esa localidad. El matrimonio tuvo tres hijos: Gloria, Carminillo y Julio César.
Mederos fue electo sucesivamente consejero departamental de gobierno (1958-1962 y 1962-1967), diputado y senador, y “compartió las campañas de 1958 y 1962 con Wilson Ferreira”, y comenzó su carrera política junto a Daniel Fernández Crespo, en la lista 51 del Movimiento Popular Nacionalista.
Posteriormente, el Movimiento Popular Nacionalista se integró a la Unión Blanca Democrática (UBD), que por el departamento de Colonia proclamó a Carminillo Mederos para el gobierno departamental y a Wilson Ferreira Aldunate a la Cámara de Representantes.
“Ambos fueron reelectos para dichos cargos en la elección de 1962”, recordó Colman, y agregó que en las elecciones de 1966, Mederos fue electo representante nacional del Departamento del Colonia por el Movimiento Nacional de Rocha.
En la elección de 1971, el dirigente coloniense fue electo senador acompañando la fórmula Wilson Ferreira –Carlos Julio Pereyra. Luego del golpe de Estado del 73, Mederos “resistió las presiones del nuevo régimen, incluida la prisión y posterior procesamiento por la justicia militar de su hijo Carminillo” y “fue un acérrimo opositor al proyecto de reforma constitucional propuesto por el gobierno militar en 1980 trabajando incansablemente y en forma entusiasta por la campaña del No.”
En base al testimonio aportado por varias personas que conocieron al desaparecido político blanco, incluyendo al actual intendente coloniense Carlos Moreira, Colman definió a Mederos como un hombre de “convicciones firmes las que defendía con vehemencia y firmeza, un hombre profundamente blanco que trabajó incansablemente superando sus dificultades de salud”.
Al frente del concejo departamental del Colonia, Mederos dejó “su legado tangible”. Entre los hitos que aparecen en la administración de Mederos al frente de ese órgano, Colman destacó el inicio de la rambla de Colonia del Sacramento y obras que implicaron un “cambio significativo para Juan Lacaze”, localidad adoptiva de Mederos.
“La mejor forma de definirlo en pocas palabras es servidor público, sirvió a Juan Lacaze, al departamento de Colonia, a su gente, al país desde el parlamento, siendo ejemplo para las generaciones futuras, por ello nuestro homenaje al profesor Carminillo Mederos”, concluyó Colman.