El sábado 27, Julio Escudero, militante sindical y del Partido Comunista desaparecido en 1976 en Montevideo, en el marco de las medidas de persecución y represión que aplicó la última dictadura militar, cumpliría 80 años. Por ese motivo, ese día, a las 11.00, el comité del Frente Amplio (FA) de Nueva Helvecia organizará un homenaje en su memoria en la puerta de su casa, ubicada en Luis Alberto de Herrera 1268, donde será colocada una placa conmemorativa.
El militante bancario
Julio Escudero, militante bancario oriundo de Nueva Helvecia, fue detenido en octubre de 1976. Su cuerpo sigue sin aparecer.
El recordado docente e investigador Omar Moreira -fallecido en 2017-, conoció a Escudero así como las peripecias posteriores que atravesaron sus familiares en la búsqueda de su paradero. En una entrevista publicada por el semanario coloniense Noticias hace una década, Moreira recordó que “de jovencito, en Nueva Helvecia, Julio pertenecía a las filas blancas del herrerismo de Colonia, y las defendía, y a sus amigos de su juventud les extrañaba su posición, que fue cercana a la JUP [Juventud Uruguaya de Pie, movimiento de la derecha uruguaya] en algún momento”.
Posteriormente, Escudero “se alejó de ese encolumnamiento nacionalista tras ver algunas cosas bastante oscuras en alguna reunión”. El joven neohelvético finalmente “ingresó a la banca privada, se transformó en dirigente sindical, y se hizo comunista”, recordó Moreira.
Las noticias sobre la detención llegaron a Nueva Helvecia, a oídos de Moreira. “Conocidos suyos nos informaron que él iba a una reunión que se desarrollaba muy cerca del Hospital de Clínicas, y había quedado con sus compañeros en que si no llegaba a tiempo era porque había sido detenido. Los aparatos de defensa del PCU [Partido Comunista del Uruguay] tenían establecido que si alguno de los compañeros no aparecía a las 24 horas era porque había caído prisionero”.
Poco y nada se supo de Escudero a partir de aquel momento. “Se perdió su voz, y lo único que quedó fue el testimonio de una detenida que estaba siendo torturada, que, por debajo de la capucha, vio que tiraron arriba de la mesa la cédula de identidad de Julio, con un dicho terrible por parte del torturador: ‘Este se fue al cielo’”. El torturador Jorge Pajarito Silveira habría formado parte del escuadrón que secuestró al dirigente neohelvético.
“Hoy por Julio no sólo están pidiendo información su familia y sus camaradas, sino todo un pueblo, para poder salir de ese pasado que nos llama y que de alguna manera tiene que cerrarse para crear algo nuevo, que no es otra cosa que creer en sí mismo y en lo mejor de sí mismo, que son ideales de toda la humanidad, como es la dignidad humana”, reflexionó Moreira pocos años antes de fallecer.
Inclusión en el nomenclátor
En 2021 la Junta Departamental de Colonia aprobó un proyecto de decreto propuesto por el Frente Amplio (FA) para modificar la ordenanza referida al nomenclátor que, entre otras cosas, establecía que para designar una calle con el nombre de una persona tenía que pasar al menos un año desde la fecha del fallecimiento.
Ese requisito impidió la concreción de una solicitud efectuada el año pasado por un grupo de vecinos de Nueva Helvecia que apuntaba a nombrar Julio Escudero a una calle de esa ciudad, según explicó a la diaria el edil socialista José Manuel Arenas.
Si bien ese escollo legal fue resuelto, aún no se ha podido concretar la asignación del nombre de Julio Escudero al nomenclátor de Nueva Helvecia “por razones de falta personal en la Dirección de Catastro donde están paralizados varios trámites similares”, explicó Arenas a la diaria.