Coronavirus Ingresá
Coronavirus

Detective gráfico 11

Menos de 1 minuto de lectura
Contenido exclusivo con tu suscripción de pago
Contenido no disponible con tu suscripción actual
Exclusivo para suscripción digital de pago
Actualizá tu suscripción para tener acceso ilimitado a todos los contenidos del sitio
Para acceder a todos los contenidos de manera ilimitada
Exclusivo para suscripción digital de pago
Para acceder a todos los contenidos del sitio
Si ya tenés una cuenta
Te queda 1 artículo gratuito
Este es tu último artículo gratuito
Nuestro periodismo depende de vos
Nuestro periodismo depende de vos
Si ya tenés una cuenta
Registrate para acceder a 6 artículos gratis por mes
Llegaste al límite de artículos gratuitos
Nuestro periodismo depende de vos
Para seguir leyendo ingresá o suscribite
Si ya tenés una cuenta
o registrate para acceder a 6 artículos gratis por mes

Editar

Tres meses después de que toda la familia Mason –Richard, su esposa Kathryn y Evelyn, la hermana de ella– sufriera un accidente en automóvil, que dejó a Richard en silla de ruedas, Kathryn fue asesinada en el mismo camino de montaña donde había ocurrido el accidente. El doctor Hamilton, terapeuta y amante de Kathryn, revela a la Policía que ella había vuelto al lugar convencida de que alguien había tratado de asesinarlos en primer lugar. Quizá Richard, que estaba enamorado de su cuñada; quizá Evelyn, que la odiaba desde hacía años. La Policía registró la escena del crimen y convocó allí a todos los interesados –Richard, Evelyn y el doctor Hamilton–, con la esperanza de descubrir al asesino entre ellos. Escribinos con la respuesta a encasa@ladiaria.com.uy.

Solución de la entrega anterior: el asesino es el hielero, a quien identificamos por la pinza. Envenenó los cubitos que utilizaron Sullivan y Monter. Por eso murieron ambos, pero no los parroquianos que tomaban bebidas sin hielo.

Este artículo está guardado para leer después en tu lista de lectura
¿Terminaste de leerlo?
Guardaste este artículo como favorito en tu lista de lectura