Los sindicatos de los trabajadores de la salud pública y privada se reunieron este martes con el presidente Luis Lacalle Pou, con el objetivo de transmitirle sus vivencias respecto de la actual etapa de la situación sanitaria. “La preocupación, tanto de la Federación de Funcionarios de Salud Pública [FFSP] como de la Federación Uruguaya de la Salud [FUS], es que se dé aire al sistema de salud, que los trabajadores de la salud vean que hay una preocupación por el tema”, dijo luego de la reunión en la Torre Ejecutiva Martín Pereira, dirigente de la FFSP, quien concurrió junto con Jorge Bermúdez, de la FUS.
“Ni las federaciones ni el PIT-CNT están planteando un toque de queda, sino que hay que bajar la movilidad. Hay herramientas para los trabajadores formales, que pueden ser utilizadas rápidamente para que el trabajador, por ejemplo, que si alguna área específica se cierra pueda ser cubierto por el seguro de paro; hoy se cobra 50% o 75% y eso se puede llevar a 100%. Ese tipo de medidas, que no son el toque de queda, pueden darle aire al sistema de salud”, afirmó el dirigente.
Añadió que los trabajadores luego “ven la cantidad de gente que hay en la calle, los bares llenos de noche, que no hay cuidados, y eso impacta en los trabajadores que están 12, 18 horas con los equipos puestos, viendo el sufrimiento de los uruguayos, y que el resto no se cuida”.
Consideró que “tiene que estar el Estado siendo parte de la solución”, porque “ya quedó demostrado que la libertad responsable individual no ha alcanzado, y estamos con un pico de casos, entonces el Estado también tiene que jugar en esto”.
Además, Pereira señaló que se le transmitió al presidente la cantidad de trabajadores que están cursando la enfermedad, unos 700 según el informe del Sistema Nacional de Emergencias, e indicó que hay cerca de otros 3.000 trabajadores en aislamiento por esos contactos.