Bohemios derrotó a Malvín en la tercera final y ganó la Liga Femenina de Básquetbol. Como en el segundo partido de la serie, el tercero también fue favorable desde el inicio a las locatarias, que se impusieron 71-62 y gritaron “dale, campeón”. No fue fácil: enfrente estaban las defensoras del título, que cuando se vieron superadas echaron el resto, sobre el final del partido, y llegaron a ponerse a tiro. La diferencia llegó a ser de 14 puntos en el último cuarto, pero las playeras acortaron la distancia. Florencia Niski, de Bohemios, tiene 16 años y fue la figura destacada de la serie final. Impresionante actuación de la número 4, goleadora del partido con 23 puntos.
Bohemios-Malvín, final del basquetbol femenino. En la foto, jugadoras de Bohemios festejan el triunfo.
Foto: Fernando Morán
En el primer año en el que el Club Atlético Bohemios presenta un equipo femenino de mayores logra el título, nada más ni nada menos que frente a las multicampeonas de Malvín, que consiguieron 15 campeonatos consecutivos, iban por el 16° y presentaban un plantel con mucha experiencia y calidad, con la capitana Florencia Somma (la única que había ganado los 15 títulos) y Sabina Bello, que venía de jugar en Argentina, por nombrar un par de jugadoras. Somma, una institución dentro del club (además, es parte del plantel profesional de Primera División), dejó hasta la última gota de sudor, pero no pudo con las chiquilinas de Bohemios, que dieron vuelta una serie final en la que habían comenzado abajo. La primera final la había ganado Malvín, y las marrones de Pocitos se quedaron con las dos restantes, pero no lo hicieron de cualquier manera, sino con mucha contundencia y claridad sobre sus rivales. Bohemios fue una fiesta: el gimnasio estaba repleto (tal como había ocurrido en las otras dos finales, tanto en Malvín como en Pocitos) para ver cómo el club se quedaba con la Liga Femenina de Básquetbol.
A la excelente actuación de Niski, que anotó 23 unidades y bajó tres rebotes, se suman las de otras dos jugadoras que se turnaron en importancia en las finales. En la segunda, determinante para empatar la serie, la chiquilina de 15 años Josefina Zeballos (se colgó al acrílico y cortó una de las redes) fue la figura, mientras que en la finalísima la argentina Camila Suárez aportó 20 puntos, bajó siete rebotes y dio cinco asistencias; un partidazo. En Malvín, Somma fue figura y pico y otra vez anotó muy buenos números: hizo 17 puntos –fue la goleadora de su equipo–, bajó diez rebotes y dio nueve asistencias, bien acompañada por Florencia Fernández, que marcó 15 tantos.
Fueron tres finales muy disfrutables. Salud, campeonas.
Triunfo de Bohemios ante Malvín en la final del basquetbol femenino.
Foto: Fernando Morán
Más definiciones
El título grande fue albimarrón, pero hubo más premiaciones en el básquetbol femenino. La Copa de Oro, trofeo que disputaron los equipos que se quedaron por el camino en las semifinales –precisamente, a manos de Bohemios y Malvín– quedó en manos de Hebraica y Macabi, que venció en alargue a Defensor Sporting 77-72.
También hubo una Copa de Plata, que se quedó Cordón. Las celestes de la calle Galicia le ganaron la final 59-39 a Capurro.