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Caitlin Shaw, Maya Antoine, Julianne Vallerand, Jayde Riviere y Anna Karpenko, de Canadá, en el estadio Charrúa.

Foto: Fernando Morán

Canadá ganó por lo hecho en el complemento

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Si las norteamericanas tienen como estrategia guardar energías en el primer tiempo para salir a liquidar el partido en el complemento, les está saliendo a la perfección. Canadá le ganó 2-0 a Corea del Sur y está más cerca de los cuartos de final. En un partido de similares características al de la primera fecha, justificó su victoria con un segundo tiempo implacable.

En la primera parte del encuentro Corea fue más, logró un mayor volumen en su juego colectivo y tuvieron más la pelota, lo que hizo que generaran varias chances de gol, aunque no pudieron concretar. A los 24 minutos llegó la chance de hacer el primero pero el travesaño lo impidió.

Canadá apenas pudo pasar el medio campo y tuvo una sola aproximación al arco rival con un remate de media distancia recién a los 43 minutos. El resto fue todo de las asiáticas, tanto a nivel individual, -destacando aquí a la jugadora número 10, Gwak Royeong, por su claridad, su destreza y sus gambetas-, como en lo colectivo.

De la misma manera que sucedió en el anterior partido de Canadá, frente a Colombia en la fecha inicial, a quien venció 3-0, se presentaron a la segunda parte con un cambio rotundo de actitud. Desde la salida se plantaron en cancha coreana dispuestas a revertir la imagen dada en los primeros 45.

La primera clara llegó a los 52 minutos con un remate que terminó en las manos de la golera de Corea. Minutos después, a los 59, la número 9, Jordyn Huitema, la agarró con pierna derecha luego de un córner y la puso al segundo palo, lejos del alcance de la guardameta coreana, convirtiendo el 1-0. Buen hándicap de la delantera canadiense que lleva dos goles en dos partidos (aunque la nota negativa es que tuvo que abandonar la cancha luego de recibir una tarjeta roja por un codazo).

El partido siguió con dominio de la selección de Canadá. Las triangulaciones, la generación de espacios, la tenencia de balón, la agresividad a la hora de presionar y al momento de atacar, hicieron que Canadá mostrara un nivel superlativo y justificara el triunfo, más aún cuando a los 74 minutos, la número 12, Lara Kazandjian, con un exquisito remate desde afuera del área marcara el segundo y definitivo gol.

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