A las 17.30 de Uruguay el vacío estadio Metropolitano estará lejos de ser la ópera y más próximo a que su césped se parezca a un sauna, con 30 grados y 85% de humedad. ¿Cómo jugará Uruguay su tercer partido de clasificatoria rumbo a Catar 2022, en pandemia, con bajas trascendentes y apenas medio entrenamiento con el plantel?
Es esperable que el esquema sea de 4-4-2, pero no es fácil despejar qué nombres completan los últimos números: Martín Campaña será el arquero, tal como en los partidos anteriores, y la línea de cuatro final sería la ideal de estos tiempos, con Martín Cáceres, José María Giménez, Diego Godín y Matías Viña. El tema está en qué se propone para la media cancha. Ante la sustantiva ausencia de Federico Valverde, el rol protagónico será de Rodrigo Bentancur, y seguramente como eje central quedará el fraybentino Lucas Torreira. Es muy probable que el fernandino Nahitan Nández se sume en el medio por el flanco derecho. El lugar de la franja izquierda es más difícil de adivinar para quienes no estamos en la cabeza del cuerpo técnico; en teoría, Nicolás de la Cruz parece el más preparado para el trabajo de ida y vuelta, con esfuerzo y creatividad, aunque también podría hacerlo el tranquerense Brian Rodríguez.
En circunstancias normales, los dos puntas deberían ser siempre Luis Suárez y Edinson Cavani, por lo que son y por lo que representan para los rivales. Como Cavani ha tenido poco rodaje se entiende que no jugará 90 minutos, y entonces habrá que ver si lo hace de entrada o en el segundo tiempo. También hay que tener en cuenta el muy buen presente del artiguense Darwin Núñez.
El equipo de Colombia tampoco está confirmado, pero David Ospina recuperará la titularidad en el arco. A falta de los laterales derechos habituales (Santiago Arias y Stefan Medina), el portugués Carlos Queiroz apelará a Luis Manuel Orejuela. Los centrales serán Jeison Murillo y Yerry Mina, mientras que Johan Mojica ocupará la banda izquierda. Wilmar Barrios y Jefferson Lerma harán la contención en el medio, y crearán Juan Cuadrado y James Rodríguez, mientras que de punta irán los delanteros del Atalanta Duván Zapata y Luis Muriel.
El tiempo pasa
En otros tiempos, quizás en junio de 1957, las empresas periodísticas –que en Uruguay siempre han destinado un lugar de importancia a la cobertura de acontecimientos deportivos– deben de haber enviado a Colombia a unos cuantos comunicadores para cubrir las alternativas de lo que por variadas y diferentes razones sería el primer partido de Eliminatorias mundialistas que jugó Uruguay. Esa costumbre, la de estar en el lugar de los hechos para que la información o narración sea fresca, descriptiva y precisa, se mantuvo hasta que el valor comercial de la cobertura del evento pasó a primar por sobre todas las cosas, incluyendo el objeto mismo de la comunicación, del periodismo serio y preciso.
Los habituales viajes de periodistas de diarios, radios y televisoras fueron mermando cada vez más, y entonces aquella práctica de correr tras la noticia junto con los protagonistas y en el lugar de los hechos fue mutando hasta que hoy, cuando se suman razones de salud que de alguna manera encubren las comerciales, no hay ni un solo medio uruguayo en Barranquilla.