En el mercado de pases de enero Edinson Cavani estuvo en todas las vidrieras. La falta de continuidad en el Paris Saint-Germain hizo que medio mundo preguntara por él, porque, precisamente, era el propio Cavani quien se mostraba interesado en dejar el club francés. No pasó. Ofertas tuvo, pero nadie dio en el clavo. Ahora, ante la finalización de la Ligue 1, sumada al vencimiento de su vínculo con el PSG –que cae en junio–, el tema se abre nuevamente.
Una de las ofertas que casi se concretaron a principios de 2020 fue el pase de Cavani al Atlético Madrid. La cosa parece ser mutua: los de Diego Simeone quieren tener al delantero para mejorar su plantilla; Edin, por su lado, tiene mucho interés en jugar en los colchoneros y la liga española. Para mejor, por cómo juega el equipo del argentino y cómo se desempeña Cavani en la cancha, la relación parece perfecta. Según trascendió en Europa, el Atlético Madrid le ofrecerá al delantero celeste dos años de contrato y el acuerdo salarial sería de 12 millones de dólares por temporada.
Las ligas de Italia e Inglaterra también representan un destino probable para Cavani. El Napoli, club en el que jugó Cavani antes de ir al PSG, ha mostrado cierto interés en ficharlo nuevamente, aunque nadie puso el dinero sobre la mesa. Inter de Milán puede ser otro de los destinos. En Inglaterra, por su parte, el probable nuevo Newcastle –equipo al que quieren comprar billetes árabes y prometen transformarlo en la nueva potencia mundial– puede ser la futura camiseta del salteño. Nada en concreto tampoco por acá.
Con mucho poder económico hace rato, los clubes brasileños también pusieron el ojo en Cavani. La finalización del contrato, que supone no pagar por su ficha y sólo arreglar el salario con el delantero, tienta al Palmeiras, al Inter de Porto Alegre y al Flamengo. Pelear una Copa Libertadores es uno de los sueños de Cavani y en esos clubes el sueño está más cerca de la realidad. Igual que jugar para Boca Juniors, equipo que mostró muchas ganas por Cavani, pero ningún billete.