Desde ayer los niños o adolescentes que egresaron de primaria pueden ir a confirmar su inscripción al liceo o escuela técnica de UTU donde hayan elegido continuar su educación. Según explicó Nicolás Ambrosi, coordinador del Sistema de Protección de Trayectorias Educativas de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP), por medio de la plataforma Gurí Familia, en la que los padres hicieron la preinscripción, se informó a cada niño en qué centro educativo quedó preinscripto: si es un liceo del Consejo de Educación Secundaria (CES) se informa el día y la hora a la que deben concurrir al centro para confirmar la inscripción, y si es un centro de UTU simplemente se espera que los padres o adultos referentes vayan al centro antes del 14 de diciembre a hacerlo (si bien las instituciones estarán abiertas hasta el 28 de diciembre). Es necesario concurrir con la cédula y el carné de salud del estudiante.
Ambrosi informó que casi 90% de los 41.946 preinscriptos quedó en la primera institución que eligió, 5% en la segunda y el resto en la tercera, y valoró que este año se hizo una recorrida por todo el país “tratando de ajustar, en función de las preinscripciones, la oferta educativa, y se agregaron algunos grupos para que la gran mayoría quede en la primera opción”.
El Sistema de Protección de Trayectorias Educativas, en coordinación con las unidades de integración educativa que existen en cada departamento, está aplicando desde 2016 un programa de seguimiento de cohortes que permitió identificar a aquellos estudiantes que abandonaron el sistema educativo. En este período de preinscripciones el trabajo permitió ubicar a 1.177 jóvenes que se preinscribieron para volver a la educación a partir de 2019, afirmó Ambrosi. “La lógica del sistema es la de una política universal, pero que a la vez pueda focalizar en estos estudiantes que estaban quedando afuera”, señaló. Las unidades coordinadoras departamentales cruzan información con el Ministerio de Desarrollo Social y con el Instituto del Niño y el Adolescente para encontrar a los estudiantes que se desvincularon, y se coordina con UTU y el CES para determinar la oferta educativa a ofrecerles, ya que estos estudiantes tienen entre 15 y 17 años de edad.
De los casi 42.000 estudiantes que deberán confirmar su inscripción, 30.608 son niños que egresan de escuelas comunes, 1.168 de escuelas especiales y 32 de internados rurales. Si el estudiante y su familia no están conformes con el centro en el que resultó inscripto o su situación cambió en este tiempo –por ejemplo, si se mudó– puede pedir un pase y en febrero confirmar, si hay lugar, si puede cambiarse al nuevo lugar elegido.