El año pasado sucedió lo mismo: por dos días consecutivos, el núcleo sindical de la Asociación de Docentes de Educación Secundaria (ADES) del liceo 50 de Casabó ocupó el centro educativo, principalmente por su situación edilicia.
Así sucedió este lunes y este martes, “ante la falta de respuesta de las autoridades”, según manifestó a la diaria Natalia Leiva, integrante de la directiva de ADES Montevideo y del núcleo docente del liceo. En ambos días, el Ministerio del Interior intimó el desalojo sobre el mediodía, pero este martes, el desalojo trajo consigo una instancia de reunión bipartita para la primera quincena de agosto, en el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS), a través de la Federación Nacional de Profesores de Educación Secundaria (Fenapes). Por esta razón, Leiva explicó que pausaron las medidas de lucha y, a partir de las respuestas que brinde el MTSS en la fecha correspondiente, evaluarán cómo seguir.
En tanto, manifestó que la situación de disconformidad docente del liceo 50 “se arrastra de hace varios años y tiene que ver con la infraestructura: los salones se llueven, las zonas eléctricas están en un estado comprometido y el MTSS constató en una inspección que no son sólo esas fallas, sino que hay más en otros espacios”.
A partir de dicha constatación, Leiva narró que “se arreglaron algunas de las situaciones, como uno de los baños, y se generó el compromiso de hacer las obras para el resto del liceo”. Según dijo, las demás obras consistían en impermeabilizar la mitad del edificio, arreglar los cuatro baños restantes “y otros espacios que están en estado crítico”. Sin embargo, la docente aseguró que “esa obra no sólo no se inició, sino que recién se aprobó la licitación, cuando hubo un tiempo más que prudente para iniciar ese proceso, de octubre del año pasado hasta fines de julio de este año”.
Los problemas edilicios son varios
Otra de las problemáticas edilicias evidenciadas por Leiva es que la lluvia traspasa la mayoría de los salones: específicamente, dijo que de ocho salones, cinco se llueven. “Tienen dos o tres baldes para aguantar el agua, y también se filtra la sala de profesores”, apuntó.
Por otro lado, señaló que el estado de las canchas deportivas del centro educativo también es parte de su plataforma reivindicativa. “No hay ni pasto, ni asfalto, ni hormigón, sino que hay pedregullo y es muy peligroso. Hay estudiantes que tuvieron heridas: uno perdió una pieza delantal en una caída y otros se han raspado”, esgrimió.
Por fuera de lo edilicio, pero como otra de las denuncias que fueron motivo de las ocupaciones y también será planteada en la instancia bipartita, la docente explicó que “al liceo se le adjudicó un grupo más por turno, pero desde hace unos años se le vienen quitando cargos de adscripción: tenemos dos a la mañana y dos a la tarde, pero tenemos un contexto socioeconómico muy vulnerado, donde el Estado no tiene presencia a través de otras instituciones. Necesitamos tres adscriptas por turno para las situaciones pedagógicas y emocionales, y tener un vínculo verdaderamente de la trayectoria estudiantil”.
En relación, Leiva especificó que debido al contexto socioeconómico en el que se encuentra el centro educativo, requieren “que se amplíe el cupo para los estudiantes que asisten al comedor”. Aseguró que ya “han pedido la ampliación” a las autoridades, pero que no ha habido “las voluntades para que eso ocurra”.
Todos los puntos mencionados, a su vez, se dan “en un marco de recorte presupuestal”, según manifestó. Asimismo, Leiva afianzó que tanto en este período de gobierno como en los anteriores, “las autoridades de la educación dejan venir a abajo los liceos y, por tanto, se requieren más recursos, por eso planteamos siempre el mantenimiento de los edificios”.
“No es un reclamo que se nos haya ocurrido después del receso de julio, en los últimos cinco años hemos mandado en torno a 20 cartas a Secundaria. Además, hemos ocupado en diversas ocasiones y solamente este año enviamos tres reclamos a Secundaria con la misma plataforma, a la que se le van incorporando elementos”, finalizó la docente.