El Ministerio de Educación y Cultura (MEC) fue sede del encuentro anual de alcance nacional de delegados estudiantiles del Centro Educativo de Capacitación, Arte y Producción (Cecap) de todo el territorio nacional. Se trata de una propuesta gestionada desde el MEC que apunta a jóvenes y adolescentes que se desvincularon o están en proceso de desvinculación del sistema educativo.
En total son 22 centros en todo el país y son casi 1.800 los estudiantes que concurren para formarse en oficios y terminar el ciclo básico. En la primera parte del encuentro realizado este martes, los delegados plantearon las fortalezas y debilidades de los Cecap a los que asisten, y en una segunda instancia se trasladaron al Espacio Modelo para tener un encuentro de recreación con el fin de “fortalecer las habilidades de liderazgo de los estudiantes, así como también proponer una evaluación del proceso transitado y una proyección de cara a 2026”.
El encuentro nacional surgió luego de que, durante el año, el Programa Nacional de Educación y Trabajo propusiera a los centros Cecap que trabajaran en conjunto para que hubiera más jóvenes involucrados en la propuesta educativa, que abarca a adolescentes y jóvenes de entre 14 y 20 años que no están estudiando ni han terminado la educación media básica. En el correr de 2025 fueron cinco los encuentros regionales en los que se trabajó para hacer una campaña que promueva la asistencia estudiantil e intercambiar sobre sus inquietudes. Este fue el sexto encuentro.
“No da lo mismo” fue el nombre de la campaña que desarrollaron desde la coordinación de los centros Cecap para que el estudiantado se la apropie y desarrolle sus propias iniciativas al respecto. Son 303 las personas que trabajan en los centros en todo el país, cifra que incluye a coordinadores, educadores y talleristas. Hubo un punto en común desarrollado por los delegados estudiantiles en el encuentro nacional de este martes: sentirse escuchados y sostenidos por los equipos de cada Cecap. Además, la mayoría manifestó que en estos centros encontraron su lugar en el mundo estudiantil, que no lo habían hallado en la educación formal.
Joaquín, delegado de Cecap del departamento de Rivera, dijo que la educación no formal permite a los estudiantes “ser ellos mismos” y una mayor “cercanía con los profesores”. Además, destacó los apoyos y materiales económicos que van de la mano de la asistencia en la mayoría de los centros Cecap: beca económica, comedores, materiales para estudiar como tablets o computadora, y boletos para trasladarse.
Clara, de Melo, planteó, sin embargo, que para llegar al centro Cecap al que asiste “faltan medios de transporte”, ya que “queda muy lejos de la ciudad”, lo que muchas veces se traduce en inasistencias, porque si hay mal tiempo no tienen cómo ir. Esto mismo fue planteado por uno de los delegados de Minas, que aseguró que gran parte de los estudiantes caminan más de dos kilómetros cada día para llegar. En el caso del Cerro, en Montevideo, reclamaron que no tienen incluida una boletera gratuita.
“La desmotivación, el desinterés, insomnio por el mal uso del celular, la estigmatización, la percepción social negativa del centro asociada a drogadictos o gente sin futuro”, dijo la estudiante de Melo como algunos de los obstáculos para asistir al Cecap que plantearon sus compañeros.
La percepción negativa de los centros fue un punto reiterado por los estudiantes. Sin embargo, todos recalcaron lo contrario: “A mí me dijeron eso y nada que ver, hay gente maravillosa”, aseguró Clara. “La gente no sabe cómo son los Cecap: es re lindo, hay mucha atención, tenemos educadores, la coordinadora siempre está presente para nosotros en lo que necesitemos”, dijo otra estudiante.
Por otra parte, al mismo tiempo que solicitaron la extensión del tiempo pedagógico, también pidieron por asistencia psicológica y apoyo emocional, “porque hay muchos problemas de salud mental y gente que necesita”. En ese marco, también se remarcó la necesidad de la ampliación del monto de la beca, que actualmente es de 1.000 pesos si el estudiante va todo el mes, y si va la mitad se reduce a 500 pesos. Por otro lado, también plantearon el deseo de que todos los Cecap tengan secundaria y UTU, no una opción u otra.
El plan de fortalecimiento de los Cecap
“Bienvenida la organización juvenil que nos empuja a los más grandes a tomar decisiones, porque, sin ustedes, ¿para quiénes son las políticas públicas? Es un honor, orgullo y alegría escucharlos”, dijo Gabriela Verde, subsecretaria del MEC.
En diálogo con la diaria, el director nacional de Educación, Gabriel Quirici, especificó que los estudiantes de los Cecap van a poder también acceder a las becas Butiá, que el gobierno extenderá a partir del año que viene, con el nuevo presupuesto. Por otro lado, dijo que la intención es aumentar las becas de los Cecap en, “por lo menos”, un 50%, es decir, que pasen a ser de 1.500 pesos por mes.
Asimismo, dijo que hay experiencias de diálogo con la Universidad Tecnológica del Uruguay en la que estudiantes de Cecap pueden usar las instalaciones de la universidad e, incluso, en las que han trabajado en proyectos juntos. En ese sentido, aseguró que está la idea de fortalecer esa línea para promover que los estudiantes sigan estudiando.
“Nos imaginamos esto como una política integral de apoyos económicos con las becas, pero también apoyos educativos en tiempo y recursos para que pueda haber docentes, educadores, también equipos de salud mental, como hablaban los chiquilines, que tengan la posibilidad real de acompañarlos en sus territorios”, además de brindarles los materiales necesarios para los estudios, continuó Quirici.
En ese marco, habló de futuros acuerdos: con la Administración Nacional de Educación Pública y el Ministerio de Desarrollo Social, ara que todos los estudiantes de Cecap tengan acceso a alimentación, y, por otro lado, con el Congreso de Intendentes, para que los boletos estén cubiertos para todos. Además, articularán con Ceibal, ya que, aseguró, se crearán Ceilabs en distintos departamentos a los que los estudiantes podrán asistir.