A menos de dos semanas de las elecciones, el candidato del Partido Colorado (PC), Andrés Ojeda, presentó este miércoles en la casa central del partido sus propuestas en materia de economía. Pero, antes de la presentación, dio una “actualización” sobre lo que calificó como el “tema en boga en estos días”, en referencia a la denuncia que hizo el martes sobre una presunta “campaña de enchastre” por parte del comando de campaña del Frente Amplio (FA). La operación consistiría en la proliferación de avisos en plataformas de video en los que se lo desprestigia.
Ojeda dijo que Mario Riorda, a quien responsabiliza por estos avisos, hasta ahora “no explicó nada” y “no le atendió el teléfono a nadie”, pese a que “lo llamó medio periodismo uruguayo”.
Según Ojeda, el candidato del FA, Yamandú Orsi, “tiene que explicar” tanto “si llamó a Riorda” como “si le pidió explicaciones, qué le dijo y cómo explica que el principal asesor de su mesa chica esté directamente involucrado en una campaña negativa de la peor calaña”. “Uruguay tiene que condenar enérgicamente las prácticas antidemocráticas”, afirmó, y fue aplaudido por el público presente.
El candidato colorado informó que en las próximas horas va a “estar poniendo en conocimiento de la Fiscalía esta situación”. Ojeda, que es abogado, dijo que a él no le corresponde “sindicar si hubo o no hubo un delito”, pero sostuvo que la Fiscalía “tiene que ser puesta en conocimiento de una situación de esta gravedad”. Dijo haberse comunicado con la vicepresidenta de la República, Beatriz Argimón, y recordó que “todos” los partidos políticos firmaron un acuerdo “en contra de este tipo de prácticas de enchastre que pretenden ser anónimas”.
Dicho esto, Ojeda se comparó con el presidente Luis Lacalle Pou, quien fue “el último que fue víctima de noticias falsas” en una campaña electoral, consideró. En 2019, Lacalle Pou “venía muy bien y lo quisieron bajar, así que me lo tomo como la mejor señal”, comentó el candidato colorado.
Ojeda afirmó, además, que el FA “está dispuesto a hacer todo lo posible para que no le cambien la elección que tenía armada”. Aseguró que una definición en segunda vuelta entre Orsi y el candidato del Partido Nacional, Álvaro Delgado, “le funciona” al FA y, por eso, “tienen que evitar a toda costa” que tenga un mejor desempeño que el blanco en la primera vuelta. “Con esta maniobra dejaron en evidencia que están dispuestos a todo para no perder la elección, [pero] nosotros nos vamos a meter en el balotaje sin tener que recurrir a ninguna de estas prácticas desterrables y le vamos a enseñar al FA que se puede ganar bien, sin hacer nada malo”, manifestó.
Las propuestas económicas
Posteriormente, Ojeda dedicó un par de minutos a los planteos económicos del PC. “Estoy particularmente orgulloso de nuestro programa de gobierno”, afirmó, y señaló que el documento tiene 256 páginas, 28 capítulos y “el laburo de más de 200 técnicos”. El programa, sostuvo, refleja “la unidad de todo el partido”.
El equipo económico que participó este miércoles en la presentación no era precisamente sinónimo de renovación. Estuvieron Isaac Alfie y Julio de Brun, dos figuras centrales del gobierno de Jorge Batlle (2000-2005), el primero como ministro de Economía y el segundo como presidente del Banco Central; Alfie también fue director de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto en este período de gobierno. También estuvieron Miguel Vieytes, que fue vicepresidente del Banco Central en el gobierno de Batlle, y Luis Mosca, que fue ministro de Economía en el segundo gobierno de Julio María Sanguinetti (1995-2000).
“Creo con franqueza que cualquiera de este equipo es mucho mejor ministro que [Gabriel] Oddone, no tengan ninguna duda”, afirmó Ojeda, en referencia a quien será el ministro de Economía en un eventual nuevo gobierno del FA.
Mosca sostuvo que “una de las piedras a remover” en el próximo gobierno es el atraso cambiario, que “en otros ámbitos se le llama deterioro de la competitividad”. Aunque aclaró que este asunto tiene varias aristas, aseguró que “hay una fundamental, que es la que tiene que ver con el problema de las finanzas públicas”. “Si nosotros no somos capaces de abatir el déficit, estamos en problemas y el próximo gobierno va a tener serias dificultades”, advirtió.
En ese sentido, en el programa del PC se sostiene que reducir el desequilibrio fiscal supone “mejorar el tipo real de cambio”; para eso, el partido propone “tener un superávit primario compatible con una gradual reducción de la ratio de deuda a PIB”. Asimismo, se sostiene que “nuestra agenda de simplificación regulatoria, de mejora educativa y de inserción laboral permitirá crecer moderando los costos internos, aliviando de esa forma la presión al fortalecimiento de la moneda”.
A su turno, Alfie dijo que para disminuir el gasto en términos del PIB hay que tener en cuenta el crecimiento económico, lo cual, a su vez, exige “reformas que sustenten ese crecimiento”, porque, “como decía Jorge Batlle, nada nace de un repollo”. Sin reformas, afirmó, Uruguay no podrá adecuarse al “mundo moderno” y “no hay crecimiento posible”. Por eso, “se están planteando una cantidad de reformas en este programa”, expresó, y propuso, como ejemplo, llevar a cabo “una optimización del sector público con una desregulación potente”.
En tal sentido, en el programa del PC se plantea, entre otras cosas, la necesidad de implementar “un eficaz programa de reducción de funcionarios públicos” a través de retiros incentivados y la no reposición de vacantes, “sin afectar derechos adquiridos”.