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Servicio a la comunidad: ¿cómo encarar la discusión con un antivacunas?

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Si bien muchos damos como un hecho probado la eficacia de las vacunas, incluyendo las anti covid-19, una teoría con cada vez más adeptos asegura que son inútiles para curar enfermedades y de hecho son peligrosas. Pero no tomar en serio a estas personas o demostrarles hostilidad sería contraproducente. Recuerda que están locos como cabras. Para convencerlos de que las vacunas son uno de los avances más importantes de la civilización humana debes escucharlos con atención y rebatir sus argumentos en forma clara y respetuosa, haciendo de cuenta que estás hablando con una persona mínimamente racional y no con un chiflado. Estos consejos te van a servir para mantener un intercambio productivo con un antivacunas.

1

Bajo ningún concepto lo llames “antivacunas”. Por más que los antivacunas estén en contra de las vacunas, ese término les parece simplificador, peyorativo y prejuicioso. Si tu interlocutor siente que te estás colocando en una posición de superioridad, se va a poner a la defensiva. Para no hacerlo enojar, evita el término. Seguramente en algún momento de la conversación él sugiera que las personas que defienden las vacunas son soberbias, poco informadas y se comportan como corderos de una manada. En ese punto evita señalarle la contradicción en la que está cayendo, porque también se va a enojar. En suma, ubícate en una posición de superioridad, pero sin que él se dé cuenta.

2

Comienza todas tus frases diciendo “es cierto que, como tú dices...”. De esta manera estarás demostrando que no estás cerrado a todos sus argumentos. Es probable que tras cinco minutos de conversación ya te haya dicho todos los argumentos mínimamente razonables con los que tú podrías estar de acuerdo. Este es el momento de improvisar cosas que él no dijo, pero que perfectamente podría haber dicho. Por ejemplo: “Es cierto que, como tú dices, las vacunas contra la covid-19 tienen fentanalinato de hidrobromatos inactivados, que es una sustancia desarrollada por George Soros y Bill Gates para esterilizar a los hombres blancos heterosexuales. Pero en las vacunas, el fentanalinato está en dosis muy pequeñas, por lo que no podría generar esterilidad”.

3

Hazle cosquillas en el abdomen mientras le hablas. Esto lo relajará y lo dejará más propenso a reaccionar en forma pacífica a los cuestionamientos. Y cuando diga algo razonable, dale comida a modo de premio.

4

Si ves que el antivacunas está arrinconado, no sigas presionando. En lugar de eso, excúsate para ir al baño, así le das tiempo para recomponerse. Aprovecha la ida al baño para enviarles un mensaje a tus familiares diciéndoles que estás bien. Seguramente, se hayan preocupado cuando les contaste que ibas a verte con un antivacunas.

5

Intenta mencionar aspectos de tu personalidad o experiencias que puedan tener puntos de contacto con su discurso. Por ejemplo, cuéntale cosas como: “A mí me dan un miedo bárbaro las agujas, así que cuando me vacunan, miro para otro lado”, “el otro día, para sacarme sangre, la enfermera me pinchó nueve veces porque no encontraba la vena”, o, “no sé para qué me di la vacuna de la gripe, si lo que más me afecta del invierno es que me duelen los huesos”.

6

Usa un bigote postizo para que no se note que estás a punto de lanzar una carcajada. Es cierto que te vas a ver como alguien ridículo, pero lo mismo va a ocurrir si no usas bigote. Y recuerda que probablemente el antivacunas también lleve un bigote postizo, por los mismos motivos que tú.

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