Si bien apenas transcurrieron tres días luego de las elecciones, varias figuras del oficialismo ya comenzaron a expresarse sobre las causas de la derrota. Las interpretaciones son varias, pero hay algo en lo que todos coinciden: la victoria de Yamandú Orsi se cimentó en la hegemonía cultural de la izquierda. “El Frente Amplio viene trabajando desde hace años para instaurar en el sentido común de la sociedad que está mal elaborar un plan para ocultarle información al Parlamento y a la sociedad, destruir documentos y apañar o directamente involucrarse en operaciones de espionaje”, opinó Roberto Lafluff.
Irene Moreira, por su parte, consideró que “la izquierda logró instaurar una visión internacionalista que avasalló la identidad política uruguaya, convenciendo a la gente de que algunas de nuestras más caras tradiciones, como darles casas a los pobres que militan para los gobernantes, son en realidad nefastas”.
En opinión de Germán Cardoso, “la batalla cultural, desgraciadamente, empezó a perderse cuando desde nuestras propias filas comenzaron a atacarnos utilizando sistemas morales que no tienen nada que ver con nuestra identidad, logrando que los electores comenzaran a preocuparse por menudencias”.
La infiltración: “No se puede retener un gobierno ante la izquierda si los propios gobernantes tienen el cerebro tomado por la izquierda, como el tarado de Guillermo Maciel”. Francisco Bustillo, exministro que no entiende por qué perdieron.