Las autoridades rusas anunciaron que todos los candidatos que lancen críticas contra el presidente Vladimir Putin, que va por la reelección en las elecciones del próximo domingo, serán encerrados en una clínica psiquiátrica. La medida fue bien vista por diplomáticos occidentales y por organizaciones defensoras de los derechos humanos. “Nos parece más que razonable. Una persona que se oponga a Putin en tiempo de elecciones claramente tiene tendencias suicidas que la convierten en una amenaza para sí misma. Nos parece que el gesto de encerrarlas en una clínica psiquiátrica es una muestra de apertura por parte del gobierno ruso”, declaró un vocero de Amnistía Internacional.
Por otra parte, un diplomático europeo confesó: “Cuando se habló de encerrar a los opositores creí que era un paso más en el avance autoritario de Putin. Pero cuando se aclaró que la idea era encerrarlos en una clínica psiquiátrica comprendí que es una medida civilizada y compasiva”.
La nota de suicidio: “Ya no aguanto más esta vida de sufrimiento. Estoy solo, enfermo y en bancarrota. Adiós”. Carta que dejó una persona antes de ir a una marcha anti-Putin.
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