Finalmente, la fórmula del gobierno para manejar la crisis del Casmu consistió en una intervención sin remoción de autoridades. La directiva de la mutualista se mostró dispuesta a trabajar en conjunto con los interventores. “Vamos a colaborar gustosos en todo lo que podamos, porque no tenemos nada que ocultar. De hecho, no queda nada para ocultar. Todo el dinero que teníamos se fue esfumando, así que no van a encontrar nada”, indicó un representante de la institución.
Desde el gobierno confían en que la intervención dará “buenos resultados” y el Casmu colapsará y luego será entregado al Círculo Católico. “Si mantenemos el gobierno y seguimos con esta estrategia, dentro de pocos años no van a quedar en el sistema de salud uruguayo mutualistas dispuestas a practicar abortos”, manifestó una fuente del Ministerio de Salud Pública.
La denuncia: “En el Casmu se estaba desperdiciando dinero de manera escandalosa. A los socios se los agendaba con una demora de apenas diez meses. Así no hay institución que aguante”. Interventor deseoso de hacer una intervención quirúrgica.