Las consecuencias de la Ley de Vivienda Promovida se notan en cada esquina de Montevideo, especialmente en las de algunos barrios puntuales. El Cordón, por ejemplo.
“Me mudé acá hace dos meses, yo soy del interior y no conozco mucho, me gustó la zona porque está cerca de todo”, confió el protagonista de esta historia a El Cascote News. Avergonzado, prefirió reservar su identidad. “Donde vivo hay como cuatro edificios en construcción y uno en el pozo, todos con carteles que dicen ‘últimas unidades disponibles’, así que pensé que era el nombre de la calle, ¿entendés?”, agregó este cándido botija.
“La ficha me cayó el otro día, cuando invité a unos compañeros de la facultad a hacer un trabajo en grupo, me pidieron la dirección de casa, les dije ‘Últimas Unidades Disponibles entre Charrúa y Guaná’ y se rieron dos horas seguidas”, concluyó.