Tal como viene ocurriendo desde hace varios años, la cantidad de niños inscriptos en educación inicial y primaria disminuyó, algo que se atribuye a la baja natalidad. Pero, por otro lado, los grupos superpoblados en las escuelas vienen en aumento. “No tiene sentido. O están gastando menos de lo que deberían gastar o no entienden nada de matemáticas”, aseguró un escolar que comenzó los cursos el miércoles de la semana pasada.
“No es lógico que disminuya la matrícula y al mismo tiempo aumente la cantidad de grupos superpoblados. Es obvio que si yo tengo un conjunto con lugar para ocho elementos y la cantidad de elementos disminuye, el conjunto debería tener menos elementos que antes, no más. Ojo, que a lo mejor hay problemas matemáticos más complejos, cuya solución requiere un enfoque contraintuitivo que supera mis capacidades. Es eso o que son unos burros”, reflexionó el escolar.
El balance: “Dejamos una educación mucho mejor que como la encontramos”. Declaración infantil.