El sábado se cumplieron 200 años del desembarco de los orientales comandados por Juan Antonio Lavalleja en la playa de la Agraciada. Para conmemorar la Cruzada Libertadora, 33 uruguayos decidieron recrear el viaje desde Buenos Aires hasta las costas del departamento de Soriano. El grupo se puso como objetivo que la experiencia fuera “lo más realista posible”, por lo que ahora amenaza con poner una bomba en la embajada de Brasil. “El trayecto, los barcos y la vestimenta nos quedaron perfectos. Nos hubiera gustado además cagarnos a sablazos con los soldados brasileños, como hizo Lavalleja después de desembarcar, pero eso no fue posible, porque hoy por hoy Uruguay no tiene presencia militar de ese país. Lo más parecido que podemos hacer es poner una bomba en la embajada”, explicó uno de los protagonistas de la recreación.
Otra de las posibilidades que manejó el grupo fue enfrentarse “con las tropas comandadas por Yamandú Orsi”, ya que su cercanía con Lula da Silva lo convierte “en un heredero de la Cisplatina”, pero este extremo se descartó porque se consideró más importante “mantener la unidad de los orientales, aun los que traicionaron nuestra causa”.
Aclaración: “La parte de unirnos a Argentina la omitimos porque la historia no es algo inamovible, sino una construcción dinámica y constante”. Oriental porteñofóbico.