Ingresá

Ilustración: Cristian Moreira (MiLoco)

La sesión de reconciliación entre Da Silva y Viera

1 minuto de lectura
Contenido exclusivo con tu suscripción de pago
Contenido no disponible con tu suscripción actual
Exclusivo para suscripción digital de pago
Actualizá tu suscripción para tener acceso ilimitado a todos los contenidos del sitio
Para acceder a todos los contenidos de manera ilimitada
Exclusivo para suscripción digital de pago
Para acceder a todos los contenidos del sitio
Si ya tenés una cuenta
Te queda 1 artículo gratuito
Este es tu último artículo gratuito
Nuestro periodismo depende de vos
Nuestro periodismo depende de vos
Si ya tenés una cuenta
Registrate para acceder a 6 artículos gratis por mes
Llegaste al límite de artículos gratuitos
Nuestro periodismo depende de vos
Para seguir leyendo ingresá o suscribite
Si ya tenés una cuenta
o registrate para acceder a 6 artículos gratis por mes

Editar

Sebastián da Silva: Estoy profundamente arrepentido de los improperios que le dirigí la semana pasada al señor senador Viera. En primer lugar, quiero pedirle perdón al cuerpo.

Constanza Moreira: Es la cuerpa.

Sebastián da Silva: No me refiero al cuerpo del senador Viera, sino al Senado.

Constanza Moreira: Por eso. Es la cuerpa. Está presidida por una mujer, Carolina Cosse, y la figura más importante de la oposición, Graciela Bianchi, también es mujer.

Sebastián da Silva: ¡Eso no se lo permito! ¡Eso no se lo permito, feminazi de mierda!

Graciela Bianchi: Tranquilo, senador Da Silva, usted sabe muy bien que no comulgo con el progresismo feminazi.

Sebastián da Silva: Bueno, la verdad es que me dejaste bastante solo peleando la batalla cultural la semana pasada. No escuché ningún insulto homófobo de tu parte.

Nicolás Viera: ¿No se supone que esta sesión era para dejar en claro que la homofobia no es tolerable en ninguna de sus formas?

Sebastián da Silva: Perdón, perdón, es que la batalla cultural hace que me hierva la sangre.

Nicolás Viera: No se preocupe, senador. Además, yo también tengo que pedir disculpas por haber dicho que usted formó parte de la estafa de Conexión Ganadera. Sé que solamente se limitó a recomendar a algunas personas que invirtieran allí y lo hizo completamente gratis, simplemente porque no sabe nada de campo.

Sebastián da Silva: ¡Eso no se lo voy a permitir! ¡No se lo voy a permitir de ninguna manera! ¡Montevideano de mierda!

Nicolás Viera: Soy de Colonia. El montevideano es usted.

Sebastián da Silva: ¡No se lo voy a permitir! ¡No se lo permito! ¡Agárrenme que lo mato!

Carolina Cosse: Señores senadores, les pido que mantengan la compostura. Recuerden que esta es una sesión para mejorar la imagen del Parlamento ante la ciudadanía. Ya que no me dejaron hacer el show con el que iba a lograr que todos los uruguayos empiecen a amar a los senadores y diputados, por lo menos eviten los papelones.

Gustavo Zubía: La mejor manera de hacer que los ciudadanos vuelvan a creer en la política es reimplementar los linchamientos de chorros en plazas públicas.

Yamandú Orsi: Esto de la pena de muerte es un tema que deberíamos analizar. No digo que esté de acuerdo ni en desacuerdo. Simplemente digo que tendríamos que conversarlo.

Carolina Cosse: Señor Orsi, le recuerdo que por más que usted sea presidente de la República, no está permitido que intervenga desde las barras.

Yamandú Orsi: No estoy interviniendo, simplemente estoy teniendo una charla como la que podría tener cualquier persona con sus amigos o compañeros de trabajo. Es más, me traje unos choricitos para tirar en la parrilla. Si la señora vicepresidenta me lo permite, voy a bajar al hemiciclo para ir haciendo el fueguito.

¿Tenés algún aporte para hacer?

Valoramos cualquier aporte aclaratorio que quieras realizar sobre el artículo que acabás de leer, podés hacerlo completando este formulario.

¿Te interesa el humor de la diaria?
None
Suscribite
¿Te interesa el humor de la diaria?
Recibí la newsletter de Humor en tu email todos los sábados.
Recibir
Este artículo está guardado para leer después en tu lista de lectura
¿Terminaste de leerlo?
Guardaste este artículo como favorito en tu lista de lectura