Una mujer privada de libertad, de 31 años, falleció en la tarde del viernes en la Unidad 5 Femenino, la cárcel de mujeres de Montevideo. La mujer estaba en el sector de prisión preventiva. La mujer solicitó asistencia y tuvo una consulta médica en la cárcel el miércoles en la noche. Cenó y se acostó a dormir. El jueves durmió todo el día y se pensó que era “parte del tratamiento”. No se volvió a despertar. El viernes sus compañeras notaron su fallecimiento sobre el mediodía y solicitaron asistencia. Cuando en la cárcel tomaron conocimiento de esta muerte, las mujeres se manifestaron por este fallecimiento, en el que, según fuentes, hubo “omisión de asistencia”, y por la atención en salud de la cárcel. Quemaron colchones, ropa y mobiliario durante varias horas.
El hacinamiento en la Unidad 5 es de 163%: hay 390 cupos y actualmente hay 634 mujeres privadas de libertad.
Juan Miguel Petit, comisionado parlamentario penitenciario, afirmó en ese momento que “los reclamos de las mujeres de las mujeres tienen que ver con mayor asistencia de salud de ASSE [Administración de los Servicios de Salud del Estado] y reclamos de salud mental y salud integral”. El lunes emitió un comunicado en el que brega por “un nuevo modelo de atención para las mujeres cumpliendo ejecución penal” y alerta que hay un “clima de decaimiento institucional que lleva a naturalizar situaciones que requieren atención específica urgente”. Petit presentó una denuncia penal ante la Fiscalía para que se investigue el caso.
Este martes, Santiago González, director de Convivencia y Seguridad Ciudadana del Ministerio del Interior, señaló en rueda de prensa que la mujer falleció por una sobredosis. Detalló: “Es una persona que en términos carcelarios ‘se empastilló’, algo que ya había sucedido. Hay que ver cuáles eran los problemas que tenía, hay distintas versiones. Tomó una cantidad de pastillas. Ella tomaba pastillas psiquiátricas que le daba ASSE. Parece que guardó algunas y consiguió otras. La vio ASSE y ahí está la investigación que está haciendo ASSE, y nosotros también”.
Sobre el informe que presentó Petit y consultado acerca de una posible autocrítica, respondió: “Yo creo que puedo hablar de mi amigo Juan Miguel. El tema del hacinamiento: nosotros estamos haciendo una ampliación de la cárcel de mujeres en los próximos días de 70 plazas. Tenemos proyectadas otras 100 plazas”.
Por otra parte, dijo que “Juan Miguel también habla un poco de las medidas alternativas en ese mismo informe, de que no todas las mujeres deberían estar allí” y que “es un análisis que incluso lo hace a largo plazo, porque él sabe y lo dice, que hoy por hoy quizás no estén las condiciones dadas”.
El jerarca aclaró que la mujer “no murió por hacinamiento”. Y agregó: “De hecho, estaba en un cuarto que si bien no es el más lindo del mundo, tenía su cama y estaba con otra reclusa. Yo estuve con las compañeras de celda”.
Sobre cómo la mujer accedió a esa cantidad de medicación, González le delegó la responsabilidad a ASSE: “Lo que pasa es esto: el Ministerio del Interior hace todo el tema de seguridad. Después hay una parte que es todo el tema de salud en general, de cualquier especialidad, también psiquiátrica, que la entrega ASSE y no el Ministerio del Interior”.